Drunkorexia o cuando las adolescentes, universitarias y mujeres maduras dejan de comer para poder beber alcohol

No se ha generado un debate respecto a la importancia que tiene una adecuada política de salud pública en estos temas, pues tanto el alcohol como el tabaco participan en un porcentaje importante de muertes y enfermedades crónicas no transmisibles, además de estar presentes en hechos lamentables como los accidentes de tránsito fatales, donde la juventud es, en general, la más afectada”. Por otra parte, Christian Deischler, psicólogo UC, está convencido de que cualquiera de estos procedimientos se tratan como adicción, no como desorden alimenticio y añade: “Ellas requieren de un trabajo en equipos complejos y es necesario descubrir las pautas y dinamismos de esa persona en particular, qué rol juega su enfermedad en el contexto de su vida, de sus relaciones, de su etapa del ciclo vital o simplemente qué simboliza”.

No sólo mujeres inmaduras y dueñas de vidas fracasadas son las principales víctimas, también están aquellas exitosas laboralmente. Junto a ellas, las universitarias son las más afectadas. Éstas, según indican los especialistas, están obsesionadas por verse delgadas y sienten que se las valora más producto de la importancia excesiva que se da, en términos de aceptación social, a beber alcohol.

Además, las mayores, saben ocultar aún mejor los síntomas y sólo son descubiertas cuando aparecen problemas de fertilidad o pérdidas de embarazos.

Sea como fuese, las más afectadas son las mujeres de entre 20 y 30 años, pertenecientes a los sectores medios y altos de la sociedad.

Como señala el especialista César Reyes, “en cualquier desorden alimentario se definen grupos de riesgo” y agrega “en la drunkorexia son las mujeres, adolescentes, muy autoexigentes tanto en lo físico como en lo académico, de ánimo depresivo o ¡ con rasgos obsesivos-compulsivos”. Sin embargo añade que los hombres también lo pueden presentar, pero en menor medida. ¿Por qué una persona comienza a desencadenar una enfermedad como ésta? César Reyes afirma que “como en todas las enfermedades, son múltiples los factores involucrados en el desarrollo de la patología:

Puede ser el “bulling”, alguna decepción amorosa o una autoimagen deformada la que contribuya al comienzo del mal”.

Según el médico, “es muy complicado para un paciente aceptar la presencia de un desorden alimenticio. Es más, la tendencia siempre es al ocultamiento y negación de la enfermedad, especialmente cuando existe sospecha de la familia. La auto consulta por estos tipos de trastornos es muy escasa; la mayoría de los pacientes acuden a una evaluación psiquiátrica en compañía de sus padres que sí detectan la enfermedad”.

2 Comentarios
  1. Uvita dice

    Mientras más dejan de comer, más lento es su metabolismo…Entonces, ¿De qué les sirve?

  2. Catalina Reyes dice

    Muy buena la nota, me senti identificada!

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