Villa San Luis: los empresarios tienen la palabra

La Justicia dejó sin efecto el decreto que otorgó a Villa San Luis el carácter de Monumento Nacional. La razón esgrimida es que el Consejo de Monumentos no escuchó a la inmobiliaria dueña del terreno, en un momento determinado del proceso administrativo.

Por Jaime Díaz Lavanchy, Vocero Comite en defensa de Villa San Luis

La justicia ordena entonces, que se revalide el valor patrimonial de la villa, después de escuchar la voz del poderoso grupo financiero que compró los últimos 4  bloques de departamentos de San Luis.

No estamos de acuerdo con el fallo, pero lo aceptamos, no queda otra. Pero, ya que la inmobiliaria va a ser escuchada, exigimos que expliquen quién es el responsable de la demolición ilegal que afectó a dos edificios de la Villa San Luis, horas antes de que fueran declarados Monumento Nacional.

Queremos saber también, cuál es la relación financiera que tienen los actuales dueños del terreno, con quienes compraron al Ejército los bloques robados en dictadura, a sus legítimos dueños. Hasta donde sabemos, ambas empresas pertenecen a Consorcio Financiero,  históricamente ligado a Hernán Buchi y a la derecha pinochetista, la misma que compro la Villa San Luis, sus 27 edificios, sin pasar por licitación pública alguna.

Pero, más allá de responsabilidades morales y políticas, la pregunta es: ¿tiene Inmobiliaria Presidente Riesco algo nuevo que agregar al proceso de declaratoria­? ¿Cuenta su gerente con alguna carta bajo la manga que no haya mostrado? Pensamos que no. Recordemos que los empresarios ya manifestaron su opinión, a través de la Cámara Chilena de la Construcción, entidad que pagó la publicación de una Declaración Pública en los principales diarios del país, el año pasado, justo antes de la toma de razón del decreto que hoy lograron dejar sin efecto.

También presentaron sus puntos de vista en un recurso de reposición, un extenso documento donde ya pidieron a la entonces ministra de Educación, Adriana Delpiano, que escuchara sus razones y anulara el proceso de declaratoria. La ministra y sus asesores revisaron los antecedentes y validaron nuevamente el decreto, puesto que los argumentos entregados no se consideraron suficientes.  En el mismo sentido, la Corte de Apelaciones ha dado la razón a la Inmobiliaria pero en un fallo donde la inmobiliaria pierde, a nuestro juicio, más de lo que gana. El tribunal ha resuelto a favor de la inmobiliaria, pero solo por no haber sido escuchada por conducto regular, desestimando todos los demás abusos que habría cometido el Estado en contra del Derecho a la Propiedad y otras supuestas faltas a la ley del proceso.

Por todo esto, confiamos en que el Consejo de Monumentos se reunirá con la inmobiliaria y volverá a declarar la Villa San Luis, Monumento Nacional, dado que los empresarios ya han dicho al gobierno, a la justicia y a la Contraloría, todo lo que tenían que decir. No tienen nuevos datos técnicos ni jurídicos que sumar, esto es un hecho innegable.

Solo debemos estar atentos a que no se aproveche este espacio de diálogo para ejercer presiones ilegítimas y forzar la demolición del último de los 27 edificios que tuvo el conjunto habitacional. Para esto quieren ser escuchados, para convencernos de demoler lo último que nos queda y construir, sobre sus ruinas, un memorial en miniatura, o bajo tierra, ahí, bien profundo, donde nadie lo vea.

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