Ha sido un honor tocar con ustedes (mi renuncia a la DC)

Creo haber sido un militante comprometido. Participé en todas las campañas a las que fui convocado. Hice puerta a puerta como ciudadano y colaboré profesionalmente como periodista. Apoyé y trabajé para candidatos presidenciales, al parlamento y a los municipios. Fui dirigente gremial en representación de la DC y con orgullo fui Presidente del Colegio de Periodistas intentando ser un buen dirigente, sin perder la esencia demócrata cristiana.

Luis Conejeros S, Periodista Ex DC (Así voy a tener que presentarme, al menos por un tiempo)

En el proceso en que mi partido dudaba de mantener la alianza de centro izquierda y participar de primarias en el conglomerado, decidí no refichar en la Democracia Cristiana. Y luego, ante la determinación del camino propio en primera vuelta, concurrí al registro electoral e hice el trámite que formalmente se llama “renunciar” al Partido.

La razón puntual de esto último es que me permite patrocinar como independiente la candidatura presidencial de Alejandro Guillier, quien creo es por lejos la mejor persona para ejercer la Presidencia de la República. Pero esto último es el resultado de un proceso, no su causa.

Milité en la DC desde los 15 (es decir por 29 años) y aunque a quienes tienen una cultura de independencia les puede parecer raro, terminar la militancia en un partido se parece bastante supongo a lo que es terminar con un matrimonio.

Las distancias, los silencios, los enojos y decepciones se van acumulando de a poco y, aunque es una decisión difícil, llega un minuto en que es la única opción disponible.

Creo haber sido un militante comprometido. Participé en todas las campañas a las que fui convocado. Hice puerta a puerta como ciudadano y colaboré profesionalmente como periodista. Apoyé y trabajé para candidatos presidenciales, al parlamento y a los municipios. Fui dirigente gremial en representación de la DC y con orgullo fui Presidente del Colegio de Periodistas intentando ser un buen dirigente, sin perder la esencia demócrata cristiana. Y en las campañas que no participé, fue simplemente porque algunos camaradas estimaron que el aporte que uno podía hacer era menor. Fui secretario nacional del Frente de Profesionales y Técnicos y presidente hasta hace poco de los periodistas DC.

Sin embargo, la DC de los “matices” que se ha venido imponiendo los últimos años ha dejado de representarme hace un rato. Cuando te pasa durante años que cada vez que escuchas al presidente de tu partido te provoca urticaria, quiere decir que uno se ha alejado o que el partido se corrió de foco. Probablemente ha pasado un poco de cada cosa.

Yo entré a militar en una DC comprometida con el comunitarismo, un partido para la cual el esfuerzo individual debía complementarse con un rol protector del Estado. Entré a militar en una DC convencida que la comunicación social debía ser un derecho social, que votó en su Congreso Ideológico por la desmunicipalización y por el término de del copago. Un partido en el cual la mayoría de sus cuadros técnicos había estudiado en la universidad gratuita. Y terminé militando en un partido que ante la propuesta de terminar con la selección escolar (probablemente el proyecto de política pública más cristiano de las últimas décadas) dudó y matizó. También ante la gratuidad y el término del copago le costó volver a sus raíces. Y ahora propone gratuidad para el 60% más pobre. O sea quiere que la educación superior la pague precisamente la clase media que dice defender.

Y así en casi todos los temas. Yo creo en el derecho de los homosexuales a casarse por la ley civil (aunque no lo puedan hacer por mi iglesia) y a adoptar niños. No creo que la capitalización individual a secas y creo que la titularidad sindical, por ejemplo.

No hablaré mal del que hasta hace pocos días fuera mi partido. Hice allí grandes amigos, y me consta que en general está constituido por gente honorable, trabajadora y esforzada, que sueña con seguir construyendo un Chile más justo y solidario. En estos 29 años me quedo lleno de aprendizajes y hombres y mujeres ejemplares. Sólo me atrevo a decir que hemos ido separando aguas y que lo natural y transparente es dar un paso al costado.

En la hora de las definiciones, yo me defino con claridad por la línea del progresismo, la libertad, la confianza en una ciudadanía adulta que toma sus propias decisiones, el respaldo a la familia del siglo XXI en todas sus formas y expresiones. Es decir, me defino por permanecer con nitidez en la centro izquierda.

A todos mis amigos en la DC, ha sido un verdadero honor tocar con ustedes.

1 comentario
  1. Teresa Valderas dice

    Miro mi renuncia todos los días por exactamente las mismas razones que expresas, pronto lo hare.

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