SBIF: Proceso judicial contra dueños de Penta «expone al banco a riesgo reputacional»
A raíz de las formalizaciones de los controladores de la entidad, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín, la entidad supervisora del sector emitió un comunicado en el que advierte que ambos personeros «se encuentran imposibilitados de ejercer cargos en la administración del banco».
Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín, según una declaración de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF), se encuentran «imposibilitados de ejercer cargos en la alta administración de la entidad, ya sea en cargos ejecutivos o como miembros de su directorio, conforme a lo dispuesto en el Número 5 del Art. 49 de la Ley General de Bancos (LGB), que establece la inhabilidad para desempeñarse en dichos cargos cuando los delitos asociados a la resolución judicial respectiva se encuentran sancionados con pena principal o accesoria de suspensión o inhabilitación temporal o perpetua para desempeñar cargos u oficios públicos».
Ello a raíz de la formalización que ambos personeros sufrieron el sábado por el 8 Juzgado de Garantías de Santiago en el marco del caso Penta y que los tiene desde ese día en prisión preventiva dentro del centro penitenciario Capitán Yaber.
Según la SBIF, conforme con lo dispuesto en el Art. 28 de la LGB, «el examen de integridad respecto de los accionistas fundadores de un banco, es un requisito que debe concurrir al momento de solicitar la aprobación de un nuevo banco, o bien, según lo dispone el Art. 36 de la misma ley, al ingresar como accionista relevante a un banco que ya existe. De acuerdo con ello, la formalización de los accionistas controladores del Banco Penta, es un hecho sobreviviente que no tiene ningún tipo de efecto jurídico respecto de dicha entidad». Pero aclara que sin perjuicio de lo señalado, «esta Superintendencia considera fundamental que quienes participen en el mercado bancario siempre mantengan una conducta irreprochable».
La superintendencia, además, manifestó su rechazo «a prácticas que vulneran la ley» y señaló «que se debe avanzar en el marco del proyecto de LGB para fortalecer la institucionalidad fiscalizadora, resguardando siempre el interés de los depositantes y usuarios de crédito».
Respecto a la posición financiera del Banco Penta en particular, la BIF dice que es «sana» y que se caracteriza «por adecuados niveles de capitalización y liquidez», pero que el proceso judicial en el que están involucrados sus dueños «expone al banco a riesgo reputacional, por lo que la SBIF ha implementado un plan de seguimiento permanente de la entidad».