Exhumación de restos de Allende permitiría confirmar su identidad y causa de muerte

Una toma de muestra ósea y un examen radiológico son parte de las pericias realizadas esta mañana al cuerpo del ex presidente. La exhumación se llevó a cabo en presencia de su familia y diversas personalidades políticas, y los estudios correspondientes están a cargo de un equipo multidisciplinario de peritos chilenos y extranjeros.
La mañana de este lunes, y en medio de gran expectación, el cuerpo de Salvador Allende fue exhumado para realizarle una serie de pericias que tienen como fin confirmar su identidad y esclarecer la causa de muerte. La diligencia es parte de la investigación llevada por el ministro Mario Carroza, y busca completar los vacíos en torno a la muerte del ex mandatario que anteriores procedimientos no pudieron llenar.
La diligencia comenzó a las 7:30 de la mañana, en presencia de la familia del ex presidente, y se extendió por 45 minutos. Luego, el féretro fue trasladado a dependencias del Servicio Médico Legal, en Recoleta, hasta donde llegó cubierto por una bandera chilena que fue colocada por las hijas de Allende, Isabel y Carmen Paz. Esto fue acompañado de una procesión de 30 personas, entre las que se contaban diversas personalidades políticas como Jorge Arrate, la presidenta del PPD Carolina Tohá, el presidente del PS Osvaldo Andrade, y los parlamentarios Guillermo Teillier, Hugo Gutiérrez, Juan Pablo Letelier y Sergio Aguiló. 
El estudio de las muestras tomadas está a cargo de un equipo multidisciplinario que incluye expertos nacionales y extranjeros. El director del SML, Patricio Bustos, señaló que existe la dificultad del “tiempo transcurrido y el estado de conservación de los restos”, pero también destacó las ventajas que hay hoy en día con los avances científicos, por ejemplo en el área de la genética e imagenología, que podrían ayudar a llegar a resultados determinantes.
Primero que todo, una muestra ósea permitirá confirmar la identidad del cuerpo que está enterrado en el Cementerio General, para luego analizar diversos exámenes y muestras para determinar la causa de muerte. En el procedimiento participan odontólogos forenses, peritos balísticos y otros médicos y expertos. Entre los extranjeros que colaborarán en esta diligencia está el español Francisco Etxeverría, tanatólogo que participó en la identificación de opositores a la dictadura de Pinochet.
La senadora Isabel Allende, en representación de la familia, señaló que tienen la “esperanza de que sus resultados (de la diligencia) permitirán despejar cualquier duda sobre las causas de la muerte del Presidente Allende y al mismo tiempo sirvan para determinar judicialmente las circunstancias en que ésta se produjo”, por lo que se hicieron parte del procedimiento. Además reafirmó que su padre “tomó la decisión de morir como un gesto de coherencia política” con el mandato entregado por el pueblo al elegirlo.
Salvador Allende murió el 11 de septiembre de 1973 en el Palacio de la Moneda, y la causa de muerte oficial es la de un suicidio, versión que incluso es aceptada por su familia. Luego de su muerte, y los apresurados trámites de identificación y la autopsia realizada en el Hospital Militar, los restos del ex mandatario fueron enterrados en Viña del Mar, donde permanecieron hasta 1990, cuando fueron exhumados para realizarle algunas pericias y poder darle una sepultura con el acto oficial correspondiente a un presidente. Ese funeral oficial tuvo lugar el 4 de septiembre de dicho año, en pleno gobierno de Patricio Aylwin y a 20 años de la elección que llevó a Allende a La Moneda. Desde entonces, su cuerpo descansaba en el Cementerio General, lugar donde se realizaron las pericias de este 23 de mayo.

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