Ex vocero del Vaticano habla de la idea de «dolor y sufrimiento» en la vida de Juan Pablo II

Tras ser investido con el grado de doctor Honoris Causa por la Universidad Santo Tomás, quien fuera vocero del ex pontífice por más de dos décadas, realizó la clase magistral “Juan Pablo II y el misterio del dolor”.

La Universidad Santo Tomás, otorgó el grado de Doctor Honoris Causa en Ciencias de la Comunicación, al destacado médico y periodista español Joaquín Navarro-Valls, por su trabajo realizado durante más de dos décadas como Director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede y Portavoz del Papa Juan Pablo II.

En la ceremonia de investidura, realizada en el Aula Magna de la UST Santiago,  el Rector Nacional de la Institución,  Jaime Vatter, destacó  que  la entrega de este grado honorífico  “es un acto lleno de solemnidad por razón de la exclusividad de la persona que lo recibe y es un acto significativo y también honorable para quienes lo conceden”,  y agregó que el reconocimiento concedido a Navarro-Valls se debe a su vocación de comunicador en vinculación estrecha y visible con la Iglesia Católica. “En su labor como vocero del Papa, supo cumplir a cabalidad las exigencias que tantas veces Juan Pablo II les hiciera a los profesionales de las comunicaciones, respondiendo a la confianza que Su Santidad depositara en él y trabajando en favor del servicio a la verdad y al bien, capaz de orientar la conducta humana y de abrir al hombre a los valores trascendentes. En este sentido, para nosotros es motivo de mucho orgullo investirlo como Doctor Honoris Causa en Ciencias de la Comunicación de la Universidad Santo Tomás y verlo integrado a nuestro Claustro de Honor, en el que lo queremos resaltar como hombre ejemplar”, dijo.

En la ocasión Aníbal Vial, miembro del directorio de Colegios Santo Tomás, y  ex Rector de la  Universidad Santo Tomás, dio a conocer a los asistentes al evento,  pasajes de la vida de Joaquín Navarro-Valls, destacando su larga trayectoria en las comunicaciones, su preparación de médico psiquiatra y periodista, y sus cualidades personales, que lo llevaron a acompañar durante 22 años a Su Santidad Juan Pablo II en la compleja tarea de dirigir las comunicaciones de la Santa Sede, siendo la primera vez que un laico desempeñaba este cargo.

Además, destacó su labor como reformulador de la filosofía comunicacional de la Iglesia y el responsable del vínculo con los medios de comunicación, siendo quien cambió la forma de presentar el mensaje del Papa, haciéndolo más cercano y directo.

Juan Pablo II  sufrimiento y dolor

Tras la investidura, realizada por el Rector Jaime Vatter, el ex portavoz de Juan Pablo II,  agradeció a la Institución por la entrega del grado de Doctor Honoris Causa en Ciencias de la Comunicación, y realizó su clase magistral “Juan Pablo II y el misterio del dolor”.

En su ponencia, Joaquín Navarro-Valls, explicó que  “elegí el tema  el sentido del sufrimiento y del dolor, en la enseñanza  y en la vida de Juan Pablo II,  porque sufrimiento y el dolor es la  experiencia humana más universal que existe. Todos, antes o después, con un nivel o con otro conoceremos, el sufrimiento y el dolor y tener sentido del dolor es parte del enorme patrimonio que nos ha dejado Juan  Pablo II”.

De esta manera, destacó que el Papa desde joven estuvo atraído por el misterio del dolor, rechazando así la idea de que la sensibilidad sobre el tema del dolor  y del  sufrimiento humano hubiera  tomado forma en Juan Pablo II, sólo después del atentado o como consecuencia  de las sucesivas y  frecuentes experiencias de enfermedad.

“A veces las conmemoraciones en los medios han subrayado como una hipotética separación entre un antes y un después en la vida de Juan Pablo II, mostrando una escisión neta, provocada precisamente por eventos dolorosos. Al Papa enérgico y vigoroso, sensible  a los temas de la justicia social, los grandes problemas del mundo, habría seguido en una segunda fase, un pontífice frágil y enfermo orientado a meditar sobre temas existenciales, sobre el sufrimiento y sobre la muerte. Puedo afirmar, me considero, sin mérito propio, testigo excepcional, que tal  consideración es equivocada”, enfatizó.

Además, comentó que Juan Pablo II  no consideraba el dolor como bueno. “No creía en el derecho a sufrir pero tampoco en el deber de sufrir, más bien como espíritu objetivo que era, entendía que en el ser humano el sufrimiento  es sencillamente inevitable, y quien piensa  poder descubrir en la naturaleza humana un derecho a no sufrir se equivoca.”

En este sentido, Navarro-Valls, relató que para el Papa, el sufrimiento porta consigo un carácter revelador de lo humano,“hay algo en el sufrimiento que descubre cualidades específicas del ser humano. Es uno de aquellos límites en los que el ser humano está destinado a superarse a sí mismo».

Pero también, resaltó el sentido del humor y optimismo de Karol Wojtyla. Según comentó para el Papa la alegría proviene del descubrimiento del sentido del dolor,  “este es el gran tema que los cristianos deben presentar a la época actual.  No faltaba en él la alegría  y la manifestación de la simpatía y el buen humor. Cuando se está convencido que la alegría proviene del descubrimiento del sentido del sufrimiento, entonces dos virtudes, buen humor y aceptación pueden estar unidas, y es base y razón y sentido de la otra , así me ha parecido ver en él hasta el fin de su vida”, señaló.

Tras la ceremonia Joaquín Navarro- Valls, viajó a la ciudad de Concepción, para participar en la  IV Jornada de Católicos y Vida Pública que se llevará a cabo este miércoles en la UST Concepción, donde se abordará   el tema “Redes sociales y redes de apoyo”.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.