Impulsan acción mundial contra inversión en combustibles fósiles

HieloLa campaña Fossil Free, que desde sus comienzos en 2012 ha liderado el movimiento de desinversión en el sector de los combustibles fósiles, ha puesto en marcha el Día Mundial de la Desinversión, una jornada de acción a escala planetaria que tendrá lugar el 13 de febrero.

“El movimiento de desinversión de los combustibles fósiles ha crecido enormemente en los últimos dos años hasta convertirse hoy en algo global”, declaró May Boeve, director ejecutivo de 350.org. “De Estados Unidos a Alemania, de Sudáfrica a las islas del Océano Pacífico, la gente está alzando su voz y plantando la cara al gigantesco poder de la industria de los combustibles fósiles. Hoy sabemos que estos combustibles pertenecen al pasado y que el futuro del planeta pasa por las energías limpias”.

Hasta el momento, 181 instituciones y gobiernos locales, y miles de personas, que acumulan un valor de más de 50.000 millones de dólares estadounidenses en activos se han comprometido a deshacerse de sus inversiones en el sector de los combustibles fósiles. Según un estudio realizado por la Universidad de Oxford, este movimiento está creciendo más rápidamente que cualquier otra campaña de desinversión anterior y supone una amenaza real y de largo alcance para la industria de los combustibles fósiles.

El Día Mundial de la Desinversión pretende aprovechar el impulso conseguido por la Marcha Climática de los Pueblos, que el pasado mes de septiembre reunió a más de 400 mil personas en las calles de Nueva York y otros cientos de miles más en todo el mundo. Los organizadores ven en la desinversión una estrategia clave de actuación en el período previo a las conversaciones de las Naciones Unidas sobre el clima que se celebrarán el año próximo en París.

“La desinversión es una herramienta fundamental para lograr el paso de los combustibles fósiles a las energías renovables en el planeta”, afirmó Payal Parekh, director de gestión global de 350.org. “El movimiento de desinversión pretende servir de modelo a los gobiernos en sus líneas de actuación. Retirar fondos del problema e invertirlos en la solución es el mejor modo de asegurar un futuro mejor para el planeta y sus habitantes”.

Las acciones previstas para el Día Mundial de la Desinversión son de muy diversa índole. Numerosos particulares planean cancelar sus cuentas bancarias y fondos de pensiones en aquellas entidades financieras que invierten en el sector de los combustibles fósiles. Estudiantes universitarios tienen previsto celebrar flash-mobs, ayunos, paros y manifestaciones en sus centros académicos para exigir que las dotaciones financieras de sus instituciones inviertan en un futuro más limpio. Líderes religiosos y habitantes de las zonas que sufren las consecuencias del cambio climático en primera línea se unirán para instar a sus comunidades a desprenderse de esta clase de activos, causantes de la destrucción del clima. Todas estas personas mandarán al planeta un mensaje alto, claro y conjunto: ha llegado el momento de que los combustibles fósiles pasen a la historia.

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