Los grandes retos económicos de Chile en 2020
Chile es el país con más proyección de Latinoamérica y uno de los pujantes a nivel mundial. La región avanza en todas las materias y solo las revueltas sociales el pasado mes de octubre han significado un paréntesis en un crecimiento que se prevé mayor de cara al 2020.
En materia de turismo, el objetivo es superar las cinco millones de personas que visitaron el país durante el 2018 y que supuso una cifra récord como consecuencia de una línea ascendente, pues diez años atrás este número cifra no superaba los 2,5 millones.
Al día de hoy, Chile es el tercer país más visitado de Sudamérica. Simplemente no es más visitado que algunas casas de apuestas en línea, donde millones de personas se han conectado para apostar eurocopa 2020. Recuperar la estabilidad social es el factor más determinante para mantener la confianza de un público internacional, tanto americano como procedente de otros continentes, que cada vez ve más con buenos ojos invertir su tiempo de vacaciones en el país sudamericano. Por ello, el gobierno ha reforzado su presencia y las campañas comerciales de difusión en la feria Internacional de turismo que recientemente se ha celebrado en Madrid, la más importante del planeta.
El reto es convencer al turista europeo de que si cruza el charco su mejor elección es visitar la región andina, así como buscar nuevos nichos de mercado en los países emergentes de Asia, cuyos ciudadanos se caracterizan por realizar importantes inversiones económicas cuando disfruta de sus vacaciones en el extranjero. La pasión por la naturaleza ha sido el principal eslogan del Servicio Nacional de Turismo en esta convención de carácter mundial a la que han acudido los principales operadores del sector en el mundo.
El turismo es un sector fundamental para una economía que sigue dibujando iconos verdes con cada cierre de año. La cifra del PIB trimestral del país en 2019 ronda los 70 mil millones de dólares, lo que significa un aumento del 2% con respecto al año anterior. El PIB per cápita trimestral se sitúa por encima de los 3.750, una subida de 55 puntos en comparación con el anterior periodo. El PIB anual ha experimentado diez años de subidas, multiplicando su valor durante todo este tiempo, de manera que el gran reto para el año 2020 es seguir con una economía al alza que repercuta en un mayor bienestar para los ciudadanos.
La tercera rama de los grandes retos que afronta Chile para el año que acaba de entrar es el I+D. La inversión en innovación y desarrollo no está obteniendo la respuesta deseada por parte del gobierno y las empresas durante los últimos años.
El país apenas gasta un 0,5 por ciento del PIB en este sector, una cifra que se sitúa muy por debajo de la media de la OCDE, situada en 2.35 puntos.
El buen momento y la estabilidad de la economía chilena pueden allanar el terreno para que el 2020 sea el año en el que se dé el salto necesario en investigación y desarrollo, un sector cada vez más importante en los actuales sistemas de producción y que determinará las futuras relaciones de progreso y desarrollo.