¿Por qué el marco legal de los casinos en Latinoamérica aún es gris?
Hay países en los que los juegos de azar están muy bien definidos legalmente como, por ejemplo, España, donde esta industria mueve decenas de millones de euros. Allá se han producido avances considerables, los cuales están muy lejos de los de América Latina aún, una zona en el que estos establecimientos de juegos de azar generan más preguntas que respuestas entre los usuarios y entre los mismos operadores.
En España, este tipo de compañías están reguladas por la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) y la práctica online es 100% legal, pero hay algunos países de Latinoamérica, por ejemplo Brasil y Chile, donde este tipo de juego está completamente prohibido aunque los usuarios no tienen ningún problema a la hora de ingresar de forma online en los extranjeros.
Colombia está a la búsqueda de un organismo oficial de regulación
Es por tanto que los casinos de países de América Latina se encuentran en una especie de zona gris que permite que sean millones de dólares de impuestos los que se escapen de las manos del Gobierno, haciendo así que la industria no crezca.
Aquí tenemos el ejemplo de Colombia, un país muy interesante para el estudio de esta industria ya que llevan años evaluando cómo regularla a través de un organismo oficial aunque es una situación totalmente estancada por el momento y parece que seguirá así por muchos años más.
En el caso de los casinos online Argentina, la regulación dependerá de la provincia en la que estén basados, a excepción de la capital, Buenos Aires, donde estos portales están prohibidos al 100%.
Perú es el mejor país, con una industria totalmente regulada
En el caso de México, el país va por buen camino y los casinos siempre pueden operar de forma online si cumplen con numerosos requisitos y obtienen también la licencia del Gobierno.
No obstante, hay un país en el que más se ha avanzado en lo que a casinos online se refiere y este es, sin duda alguna, Perú, donde empresas han podido operar sin ningún tipo de problemática y el Gobierno recauda fondos a través de los impuestos, ya que este tipo de establecimientos tienen que pagar hasta el 20% de su facturación para poder operar.
Es por eso por lo que el país ha demostrado cómo vivir en armonía con esta polémica industria que mueve billones en todo el mundo, convirtiéndose así en una excelente fuente de trabajos.
La diferencia entre los diferentes países y continentes es abismal y cada uno tiene una legislación, por lo que solo queda esperar a ver si las diferentes naciones de Latinoamérica siguen el ejemplo de Perú, en los que este tipo de juegos y locales está totalmente regulado, así como accesible a sus ciudadanos o, en cambio, deciden mantener el mercado lejos de ellos.