El otro 29 de junio: del Tanquetazo a las primarias, dos momentos clave de la historia política chilena
Este domingo se celebran en Chile las primarias presidenciales del oficialismo, una jornada democrática que, paradójicamente, coincide con un episodio oscuro de la historia reciente del país: el fallido golpe de Estado conocido como el “Tanquetazo”, ocurrido el 29 de junio de 1973.
Hace exactamente 52 años, un grupo de militares liderados por el teniente coronel Roberto Souper intentó derrocar al gobierno democráticamente elegido del presidente Salvador Allende. La sublevación fue sofocada por fuerzas leales al gobierno, pero dejó un saldo de 22 personas muertas y anticipó lo que ocurriría dos meses y medio después, el 11 de septiembre de ese mismo año, cuando se consumó el golpe militar encabezado por Augusto Pinochet.
Hoy, más de cinco décadas después, el país vive un momento radicalmente distinto: miles de ciudadanos y ciudadanas acuden a las urnas para participar en la definición del candidato o candidata que representará al bloque oficialista en las elecciones presidenciales de noviembre. Un proceso democrático, participativo y pacífico, que contrasta con el asalto armado de 1973.
Ambas fechas, además, tienen un apellido en común: Tohá. El padre de la actual candidata, Carolina Tohá, José Tohá, era en ese momento ministro del Interior, se encontraba en el palacio y, a pesar de la gravedad de la situación, se mantuvo junto al presidente Allende, demostrando su compromiso con la democracia. Hoy su hija aspira a ser la candidata única del progresismo y llegar a La Moneda.
La coincidencia de fechas, por otro lado, no ha pasado inadvertida para muchos sectores políticos, que destacan la importancia de fortalecer la democracia como respuesta a los periodos de autoritarismo.
“Votar es esencial para que construyamos una patria común”, señaló este domingo el presidente Gabriel Boric tras sufragar en su natal Punta Arenas. “Tenemos desafíos enormes, pero solo a través de la participación ciudadana podremos enfrentarlos de manera justa y democrática”, añadió.
Desde distintos puntos del país, los candidatos oficialistas —Carolina Tohá, Jeannette Jara, Gonzalo Winter y Jaime Mulet— han reiterado sus llamados a la unidad del progresismo, reconociendo la importancia de legitimar liderazgos a través de mecanismos institucionales y no por imposiciones.
Por su parte, las expresidentas Michelle Bachelet y Ricardo Lagos también se sumaron al proceso, manifestando su compromiso con quien resulte electo. Bachelet, antes de viajar al extranjero, aseguró que “se pondrá a disposición del candidato o candidata ganadora”, mientras que Lagos votó en Santiago acompañado de su hijo, el senador Ricardo Lagos Weber, quien compartió una foto con el mensaje: “Con mucho entusiasmo participando de las primarias”.
La jornada de este 29 de junio es, en definitiva, un símbolo del camino que ha recorrido Chile desde la ruptura institucional de 1973 hasta una democracia que —con sus desafíos y tensiones— sigue apostando por la participación ciudadana como su principal motor de transformación.
Así, el Tanquetazo y las primarias quedan unidos por una fecha, pero separados por el espíritu con el que fueron protagonizados: uno con fusiles y tanques; el otro con votos y urnas.
