Con el 45,07% de las mesas escrutadas, la exministra del Trabajo Jeannette Jara (PC) se perfila como la vencedora indiscutida de las primarias presidenciales del bloque oficialista, obteniendo un 60,28% de las preferencias y consolidándose como la carta única del progresismo de cara a las elecciones de noviembre.
En una jornada marcada por las bajas temperaturas y una competencia centrada principalmente entre dos postulantes, Carolina Tohá (PPD) alcanzó el segundo lugar con un 27,89% de los votos, seguida por Gonzalo Winter (Frente Amplio) con un 8,92% y Jaime Mulet (Federación Regionalista Verde Social) con un 2,9%.
Los resultados parciales fueron entregados por el Servicio Electoral (Servel) y, aunque aún se espera el escrutinio total, ya existe consenso en el oficialismo sobre el triunfo de Jara.
“Al final del día los sectores progresistas vamos a estar todos unidos detrás de una sola candidatura”, expresó el presidente Gabriel Boric desde Punta Arenas, donde ejerció su derecho a voto mientras se encuentra en su permiso postnatal.
Una campaña marcada por la inclusión
Durante su campaña, Jara enfatizó la necesidad de construir un proyecto inclusivo, centrado en los derechos sociales y en el fortalecimiento del Estado. Bajo el lema “Chile justo, seguro y próspero”, buscó conectar con sectores históricamente marginados y apeló a la experiencia política acumulada en su paso por el Ministerio del Trabajo y por la dirigencia estudiantil.
Desde su comando destacaron que el triunfo responde a un mensaje claro de unidad y justicia social, y llamaron a consolidar una coalición amplia para enfrentar a la derecha en noviembre.
Participación moderada, proceso normal
Pese al carácter voluntario del voto, el proceso se desarrolló con normalidad, según informó el Servel. La constitución de mesas fue considerada adecuada para este tipo de elecciones, aunque la participación ciudadana se mantuvo en rangos moderados, influida en parte por las condiciones climáticas.
Se espera que, durante la noche, Jara se dirija al país para agradecer el respaldo y delinear los primeros trazos de su programa presidencial.
Con este resultado, el oficialismo ya tiene candidata única, y la atención se centra ahora en los desafíos que enfrentará Jara en la recta final hacia La Moneda.
