Netanyahu llama de vuelta a su equipo negociador en Catar tras contraoferta de Hamás
"Agradecemos los esfuerzos de los mediadores Catar y Egipto, así como los de [el enviado especial estadounidense Steve] Witkoff, para lograr un avance en las conversaciones", afirmó la oficina del primer ministro.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llamó a su equipo negociador en Catar para «continuar las consultas en Israel», tras la respuesta del movimiento palestino Hamás a la última propuesta de alto el fuego en la Franja de Gaza, informó la oficina del gobernante en un comunicado.
«Agradecemos los esfuerzos de los mediadores Catar y Egipto, así como los de [el enviado especial estadounidense Steve] Witkoff, para lograr un avance en las conversaciones», afirmó la oficina del primer ministro.
El comunicado no aclara si este hecho indica un fracaso o el éxito de las conversaciones.
Por su parte, una fuente de alto rango de Hamás declaró en condición de anonimato que aún existía la posibilidad de alcanzar un acuerdo de alto el fuego en Gaza, pero que tardaría algunos días debido a lo que denominó la demora israelí, según recogió Al Arabiya.
La fuente indicó que la respuesta de Hamás a la última propuesta de alto el fuego incluyó la solicitud de una cláusula que impidiera a Israel reanudar la guerra si no se alcanzaba un acuerdo antes del final del período de tregua de 60 días.
La misma persona también indicó que Hamás propuso un nuevo mecanismo para la liberación de rehenes a cambio de prisioneros palestinos, y afirma que el tema no se ha discutido en absoluto hasta el momento.
La guerra en el enclave estalló después de que miles de palestinos liderados por Hamás atacaran el sur de Israel matando a 1.218 personas, la mayoría civiles, y tomaran 251 rehenes el ataque del 7 de octubre de 2023.
Del 19 de enero al 1 de marzo en la Franja de Gaza rigió un alto el fuego en el marco del acuerdo entre las partes sobre la liberación de rehenes israelíes a cambio de presos palestinos.
Durante seis semanas los grupos palestinos liberaron a 30 rehenes vivos y entregaron los cuerpos de ocho fallecidos. A su vez, Israel puso en libertad a unos 1.700 presos palestinos y retiró tropas desde el interior de la Franja de Gaza.
Mientras que la cifra de palestinos muertos en la guerra que comenzó hace un año y nueve meses asciende a más de 59.220 y los heridos superan los 143.000.
Al expirar oficialmente la tregua, las hostilidades seguían sin reanudarse por los intentos de los mediadores de involucrar a las partes en unas negociaciones continuas sobre un acuerdo en Gaza.
Sin embargo, Israel dejó de suministrar electricidad a la planta desalinizadora en Gaza y cerró el acceso a la entrada de camiones de ayuda humanitaria al enclave.
En los últimos meses Netanyahu permitió la entrada de ayuda humanitaria, debido a la presión internacional y la adjudicó a la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF, por sus siglas en inglés) el reparto, en contra de la opinión de todas las organizaciones humanitarias que trabajan sobre el terreno en Gaza, que la consideran una empresa no profesional humanitaria y que sirve a motivos políticos israelíes.
Israel reanudó la ofensiva bélica, rompiendo el alto el fuego, a mediados de marzo aduciendo la inflexibilidad de Hamás.
