
«Queremos una solución pacífica y democrática para el Sáhara»: Movimiento Saharaui por la Paz desafía hegemonía del Polisario
Mohamed Cherif, dirigente del Movimiento Saharaui por la Paz (MSP), actual responsable de relaciones internacionales de la organización, expone la visión de una nueva corriente saharaui que se desmarca del Frente Polisario, cuestiona su liderazgo y propone el diálogo como única vía para resolver el conflicto en el Sáhara Occidental.
El Movimiento Saharaui por la Paz nació en plena pandemia, el 22 de abril de 2020 en España, con un grupo de disidentes del Polisario, entre ellos exmilitares, exembajadores y antiguos responsables de relaciones internacionales. Según Mohamed Cherif, se trata de una “reflexión colectiva” tras más de 50 años de conflicto y estancamiento: “La guerra no ha aportado nada. El Polisario no quiso escuchar ninguna otra voz interna y tomó una decisión unilateral de volver a la guerra en 2020, cuando el lenguaje en Naciones Unidas ya cambió y solo se habla de una solución negociada”.
El MSP, que se declara independiente y sin vínculos formales con Marruecos, sostiene que el plan de autonomía presentado por Rabat en 2007 ante la ONU es un “buen punto de partida” para una solución realista y pacífica. “Nosotros no somos un partido político, pero sí una nueva voz saharaui. Representamos a más de 4.000 militantes, muchos de ellos en la diáspora, y fuimos reconocidos con el mismo estatus que el Polisario en el último Congreso de la Internacional Socialista en Estambul”, señala Cherif.
El dirigente denuncia también las condiciones actuales en los campamentos de refugiados en Tinduf (Argelia), asegurando que “no hay seguridad, hay desorganización total, tráfico, radicalismo y una estructura autoritaria que no acepta el disenso”. Agrega que el Polisario “ha cometido horrores, ha matado y torturado a disidentes en cárceles secretas como la de Rachid”, y afirma que dentro de su propia organización hay miembros que aún viven bajo esa estructura, aunque en silencio, por temor a represalias.
«Queremos que la comunidad internacional escuche esta nueva voz saharaui, democrática, pragmática y pacífica», subraya Cherif. “Muchos saharauis están dejando el Polisario y nos apoyan desde España, Mauritania y otros países. Queremos un diálogo serio, sin exclusiones ni acusaciones de traición. Ya no se trata de guerra, sino de garantizar dignidad, identidad y autonomía real como en otras regiones del mundo”.
El MSP mantiene relaciones con partidos políticos de América Latina, Europa y África, y destaca que su propuesta no busca eliminar al Polisario, sino demostrar que el pueblo saharaui no tiene una sola voz ni una sola representación: “No queremos más víctimas ni guerras manejadas desde pantallas en Rabat o Argel. El tiempo del monólogo terminó. Hoy pedimos espacio para un nuevo diálogo saharaui, desde el interior y hacia el mundo”.