
Reclusión preventiva de Martín Vizcarra en penal de baja peligrosidad
El penal es considerado el centro penitenciario más grande y hacinado de Perú, el cual acoge a delincuentes de alta peligrosidad.
El expresidente peruano Martín Vizcarra (2018-2022) será recluido preventivamente en un penal de Lima de baja peligrosidad, dentro del juicio que se le sigue por presuntos delitos de corrupción, informó el viernes el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), que anteriormente había fijado la cárcel más grande y hacinada del país como su destino.
«El procesado Martín Alberto Vizcarra Cornejo ha sido clasificado por la Junta Técnica de Clasificación al Establecimiento Penitenciario Lurigancho. Sin embargo, por medidas de seguridad penitenciaria se ha dispuesto su traslado al Establecimiento Penitenciario Ancón II», informó el INPE a través de su cuenta en la red social X.
El 13 de agosto, el Poder Judicial impuso cinco meses de prisión preventiva a Vizcarra, y el miércoles el INPE anunció que el expresidente iba a ser recluido en el Establecimiento Penitenciario Lurigancho, también conocido como Penal de Lurigancho.
El penal es considerado el centro penitenciario más grande y hacinado de Perú, el cual acoge a delincuentes de alta peligrosidad.
La defensa legal de Vizcarra protestó la medida y afirmó que el internamiento en dicha cárcel ponía en riesgo la vida del expresidente.
El viernes, el INPE dio marcha atrás y determinó el envío de Vizcarra a Ancón II, una cárcel de baja peligrosidad, ubicada en Lima y destinada a internos comunes y algunos procesados por corrupción.
El organismo aseguró que esta cárcel «cuenta con las condiciones adecuadas para la permanencia (de Vizcarra), además de brindar la seguridad necesaria con el fin de salvaguardar su integridad física y/o psicológica».
El ex jefe de Estado es enjuiciado por presuntamente haber recibido 2,3 millones de soles (cerca de 621.000 dólares) a cambio de otorgar concesiones a empresas privadas para la ejecución de dos obras públicas.
Los delitos por los que se lo acusa se habrían cometido entre 2011 y 2014, cuando Vizcarra era gobernador del departamento de Moquegua (sur).