
U. de Chile descarta muertes y denuncia falta de resguardo tras hechos violentos en Avellaneda
A través de un comunicado, la institución denuncia que “con las crudas imágenes de violencia que han circulado en todos los medios, haya un centenar de hinchas chilenos detenidos y ningún agresor de la parcialidad local”.
Universidad de Chile emitió un duro comunicado tras los hechos de violencia ocurridos anoche en el estadio Libertadores de América, donde hinchas azules fueron brutalmente agredidos en el marco del partido suspendido ante Independiente por la Copa Sudamericana.
El club calificó lo ocurrido como “uno de los capítulos más violentos de la historia del fútbol” y cuestionó la falta de garantías por parte de la organización y la policía argentina. Según detallaron, barristas locales ingresaron sin obstáculos al sector visitante, atacando a los pocos hinchas que permanecían allí, además de provocar destrozos en el bus de la delegación e intentar irrumpir en el camarín del plantel.
Tras la suspensión del encuentro por decisión de Conmebol, directivos de la U encabezados por el presidente, Michael Clark, recorrieron hospitales en Avellaneda y Sarandí para verificar el estado de los hinchas heridos. El club informó que, de los 19 hospitalizados, 16 fueron dados de alta y uno de los casos más graves evolucionó favorablemente tras una operación por fractura de cráneo.
Asimismo, la dirigencia constató la situación de los hinchas detenidos en comisarías de Avellaneda, donde destacó el apoyo de la cónsul chilena en Buenos Aires, Andrea Concha. El club también agradeció las gestiones del embajador José Antonio Viera-Gallo y del gobierno chileno, que dispuso el viaje del ministro del Interior, Álvaro Elizalde, para apoyar a los afectados.
“Nos llama la atención que, con las crudas imágenes de violencia que han circulado en todos los medios, haya un centenar de hinchas chilenos detenidos y ningún agresor de la parcialidad local”, advierten.
La institución recalcó que “lo deportivo pasa a segundo plano cuando hay vidas humanas comprometidas” y exigió sanciones contra los responsables de la violencia y contra quienes no garantizaron la seguridad del encuentro.