
CIJ ordena a Israel facilitar ayuda humanitaria en Gaza y desestima acusaciones contra UNRWA
El máximo tribunal de la ONU recordó que Israel, como “potencia ocupante”, debe garantizar alimentos, agua y medicinas a la población de Gaza y permitir las operaciones de la ONU. Tel Aviv calificó el fallo de “previsible” y acusó a la agencia de refugio palestina de colaborar con Hamás.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) declaró este miércoles que Israel “tiene la obligación de aceptar y facilitar” la entrega de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza, incluyendo la canalizada a través de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA).
“El tribunal considera que Israel debe aceptar los planes para la entrega de ayuda, tanto de Naciones Unidas como de sus entidades”, afirmó el presidente de la CIJ, Yuji Iwasawa, quien subrayó que el Estado israelí “tiene la obligación de cubrir las necesidades básicas de la población local, lo que incluye alimentos, agua, refugio, combustible y suministros médicos”.
El magistrado agregó que Israel no presentó “pruebas que respalden” las acusaciones sobre una supuesta vinculación entre la UNRWA y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), como ha sostenido el Ejército israelí. “Estas acusaciones no están respaldadas por evidencia”, dijo Iwasawa, recordando que la agencia ha sido “una pieza fundamental” en la respuesta humanitaria desde los ataques del 7 de octubre de 2023.
El fallo también recuerda que Israel debe permitir el libre movimiento del personal de Naciones Unidas y de las organizaciones humanitarias en la zona, además de respetar la prohibición de deportaciones o traslados forzosos de población y proteger los derechos de los presos palestinos.
“El tribunal considera que Israel debe cumplir sus obligaciones bajo el Derecho Internacional como potencia ocupante”, agregó Iwasawa, insistiendo en que se debe respetar la inviolabilidad de las instituciones de la ONU y el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación.
La resolución subraya que no hay pruebas de que la UNRWA haya vulnerado los principios de neutralidad e imparcialidad contenidos en el Cuarto Convenio de Ginebra.
Desde Jerusalén, el portavoz del Ministerio de Exteriores israelí, Oren Marmorstein, calificó la postura de la CIJ de “previsible” y la consideró “otro intento político de imponer medidas contra Israel bajo el pretexto del Derecho Internacional”.
Marmorstein acusó a la UNRWA de estar “infiltrada por Hamás” y aseguró que “empleados de la agencia participaron directamente en la masacre del 7 de octubre”. Según el diplomático, Israel ha entregado “amplias pruebas” a la ONU sobre esta presunta infiltración, aunque “nunca se ha investigado su alcance total”.
Por su parte, el embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, lamentó la decisión y acusó al tribunal de “culpar a Israel de no cooperar con organismos que se han convertido en un campo de cultivo de terroristas”.
“Israel cumple plenamente con sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional y rechaza la politización del mismo para generar resultados políticos”, añadió el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
Los comentarios están cerrados, pero trackbacks Y pingbacks están abiertos.