Israel acusa a Hamás de entregar restos de un rehén ya recuperado en 2023

El Gobierno israelí denunció una “violación del acuerdo” por parte de Hamás tras confirmar que los restos entregados el lunes corresponden a Ofir Tzarfati, cuyo cuerpo fue hallado hace casi dos años en Gaza. La familia del rehén calificó el hecho como una “despreciable manipulación”.

Las autoridades de Israel afirmaron este martes que los restos entregados el lunes por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) pertenecen a Ofir Tzarfati, un rehén israelí cuyo cadáver ya había sido recuperado en diciembre de 2023 durante una operación militar en la Franja de Gaza.

“Tras completar el proceso de identificación, se determinó que los restos corresponden al difunto rehén Ofir Tzarfati, quien fue recuperado en la Franja de Gaza hace casi dos años”, informó la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu en un comunicado difundido en la red social X. “Esto supone una clara violación del acuerdo por parte de la organización terrorista Hamás”, añadió.

El Gobierno israelí acusó al grupo palestino de engañar deliberadamente a través de un montaje. Según fuentes oficiales, un dron israelí habría registrado a milicianos de Hamás cavando un agujero donde luego depositaron los restos entregados, lo que demostraría —según Tel Aviv— un intento de manipular el proceso pactado para la devolución de los rehenes.

Netanyahu encabezará una reunión de seguridad para evaluar las medidas a adoptar “ante las continuas violaciones” del acuerdo alcanzado hace más de dos semanas con mediación de Estados Unidos.

La familia de Tzarfati calificó lo ocurrido como un acto “despreciable” y aseguró haber visto el video grabado por el dron. “Una vez más, fue un engaño a costa de nuestra familia. Es la tercera vez que nos vemos obligados a abrir la tumba de Ofir para volver a enterrarlo”, lamentaron en un comunicado.

Por su parte, el portavoz de Hamás, Hazem Qasem, negó que el grupo conozca la ubicación de los cadáveres restantes y afirmó que trabaja “a contrarreloj” para completar el acuerdo, acusando a Israel de “poner obstáculos” a su cumplimiento.

El pacto, alcanzado a mediados de octubre, contemplaba un alto el fuego en Gaza, la liberación de 20 rehenes con vida y la entrega de 15 cuerpos por parte de Hamás. A cambio, Israel liberó a unos 2.000 prisioneros palestinos y entregó cerca de 200 cadáveres. Las autoridades israelíes aún esperan la recuperación de otros trece cuerpos de los secuestrados durante los ataques del 7 de octubre de 2023, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 250 rehenes.

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El Periodista