Hamás y facciones palestinas rechazan fuerza internacional propuesta por EEUU

Los grupos armados aseguran que el plan estadounidense implica “tutela internacional” y abre la puerta a una “dominación externa” sobre Gaza. Exigen que cualquier misión opere bajo mandato directo de la ONU y sin condiciones de desarme.

El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y el resto de las facciones palestinas de Gaza manifestaron este domingo su rechazo frontal a la propuesta estadounidense de crear una Fuerza de Estabilización Internacional para la Franja, iniciativa que será votada este lunes en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

A través de un memorando conjunto, las milicias calificaron el proyecto como “un intento de imponer una tutela internacional sobre la Franja y de transmitir una visión sesgada a favor de la ocupación”. Según señalaron, el papel asignado a la fuerza de estabilización “la transforma en una entidad al servicio de la ocupación mediante la coordinación directa con ella”.

Los grupos palestinos sostuvieron que, de establecerse una misión internacional, esta debe operar únicamente bajo el mandato directo de Naciones Unidas y en coordinación exclusiva con las instituciones oficiales palestinas. Indicaron que sus funciones deben limitarse a la protección de civiles, el flujo de ayuda humanitaria y la separación de fuerzas, sin asumir competencias de seguridad ni transformarse en una “administración supranacional”.

El documento advierte que la propuesta de Washington “abre la puerta a la dominación externa de la decisión nacional palestina”, al otorgar a un organismo internacional amplios poderes sobre la administración y reconstrucción de Gaza, “privando así a los palestinos de su derecho a gestionar sus propios asuntos”.

Asimismo, el memorando subraya que la ayuda humanitaria debe canalizarse a través de instituciones palestinas, bajo supervisión de la ONU y con respeto a la soberanía palestina. Alertan, además, sobre el riesgo de “instrumentalizar políticamente” la asistencia y de convertirla en una herramienta de presión externa, lo que —advierten— podría marginar a las instituciones locales y debilitar a la UNRWA, cuyo rol consideran “esencial e irremplazable”.

Las facciones palestinas también rechazaron cualquier cláusula que implique el desarme de Gaza o que vulnere “el derecho del pueblo palestino a resistir y defenderse”. Enfatizaron que cualquier debate sobre las armas debe circunscribirse a un proceso político interno que incluya el fin de la ocupación y garantice el derecho a la autodeterminación.

La declaración se conoce en la víspera de la votación en el Consejo de Seguridad, mientras Estados Unidos asegura contar con el respaldo de sus miembros para el plan. Rusia, por su parte, presentó el viernes una propuesta alternativa que introduce ajustes con el fin de “alinear plenamente” la iniciativa con resoluciones previas del propio organismo. Entretanto, Washington y sus aliados árabes y musulmanes defendieron el proyecto como la vía “más realista” para avanzar hacia la estabilidad y la autodeterminación palestina.

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El Periodista