Gremio judicial se alinea con Chevesich y llama a respetar tradición histórica en elección de la Suprema

A días de que el Pleno de la Corte Suprema defina a su próximo presidente para el período 2026-2027, la Asociación Nacional de Profesionales de la Administración del Poder Judicial (Aprajud) tomó posición y defendió la tradición de elegir como cabeza del máximo tribunal al ministro o ministra de mayor antigüedad, criterio que en esta ocasión favorecería a Gloria Ana Chevesich.

Mediante una declaración pública, el gremio manifestó su preocupación ante versiones que apuntan a un eventual quiebre de esta práctica histórica —vigente por más de dos siglos—, en favor de la ministra María Angélica Repetto, alternativa que estaría siendo promovida por un grupo de ministros descontentos por la forma en la que Chevesich estaría llevando las investigaciones internas tras los casos de corrupción conocidos en el Poder Judicial.

Si bien, Aprajud reconoció que “es urgente y muy necesario un cambio estructural para el origen y resolución de los nombramientos judiciales”, recalcó que existen “métodos y tradiciones que le hacen bien al servicio judicial”, especialmente en momentos de crisis institucional. En esa línea, advirtieron que alterar el procedimiento histórico de elección podría afectar la estabilidad y la continuidad del Poder Judicial.

“La tradición de elegir a la ministra o ministro de mayor antigüedad evita las sospechas de alineamientos circunstanciales, disputas intestinas o presiones que afecten directamente la independencia judicial”, señalaron, agregando que este orden ha sido una señal de imparcialidad y respeto por la carrera funcionaria.

Desde la asociación subrayaron que, en el actual escenario —marcado por investigaciones administrativas y penales contra jueces—, resulta clave resguardar aquellas prácticas que han entregado “certeza, transparencia y coherencia” en la conducción institucional del Poder Judicial.

Finalmente, Aprajud hizo un llamado “respetuoso pero firme” a que la decisión que adopte el Pleno el próximo lunes se realice con sentido institucional y altura de miras, apelando a las virtudes de prudencia, justicia, templanza y fortaleza, con el objetivo de resguardar la probidad, la independencia judicial y la estabilidad del máximo tribunal del país.