
Zelenski entrega a Estados Unidos una nueva versión del plan de paz
El presidente ucraniano confirmó que Kyiv presentó a Washington un borrador actualizado que incorpora posiciones europeas y sostuvo que cualquier decisión sobre los territorios ocupados debe ser sometida a la voluntad popular. También advirtió que Rusia pretende controlar “todo el Donbás”, una exigencia que Ucrania rechaza.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, anunció este jueves que su gobierno entregó a Estados Unidos una nueva versión del borrador del acuerdo de paz, un documento que —según afirmó— recoge no solo la postura de Kyiv, sino también las consideraciones de varios socios europeos.
“No es un plan definitivo, es una reacción a lo que recibimos, a las condiciones previas”, explicó el mandatario durante un encuentro con la prensa en Kiev. Zelenski subrayó que el texto continúa en proceso de ajuste y que el resultado final dependerá de cómo evolucionen los cerca de veinte puntos clave incluidos en el borrador.
El presidente ucraniano admitió que las posiciones entre Kyiv y Moscú continúan muy distantes, especialmente en lo relativo a la región del Donbás. “Los rusos quieren todo el Donbás, pero nosotros, por supuesto, no lo aceptamos”, afirmó.
En este marco, Zelenski defendió que cualquier decisión que afecte a la soberanía de los territorios actualmente ocupados por Rusia debería ser tomada directamente por la ciudadanía ucraniana. “Debe existir una postura del pueblo ucraniano, ya sea a través de elecciones o un referéndum”, señaló, insistiendo en que será la población quien “responda a esa pregunta”.
Entre los principales desacuerdos, destacó la situación en la región de Donetsk, donde Moscú exige la retirada de las tropas ucranianas a cambio de comprometerse —con el aval de Estados Unidos— a no desplegar a las suyas. Kyiv rechaza esta condición por considerarla una cesión de soberanía y de control territorial.
La presentación de este borrador revisado se produce mientras continúan las presiones internacionales para reactivar las negociaciones y avanzar hacia un eventual alto el fuego, en un conflicto que ya se aproxima a su cuarto año y mantiene líneas del frente prácticamente estancadas pero con elevado costo humano y material.
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