$70 millones deberá pagar Municipalidad de Talcahuano a familia de niño que falleció víctima de bullying
Rodrigo Cortés murió el 17 de mayo de 1998, a causa de lesiones sufridas tras un altercado con un compañero de curso, el 8º básico A de la Escuela E-470. La tercera sala de la Corte Suprema rechazó un recurso de casación interpuesto por el municipio contra la sentencia (de la Corte de Apelaciones de Concepción, en 2009), y ratificó el monto de la indemnización para la madre y los hermanos del menor por concepto de daño moral.
Una indemnización de $70 millones deberá pagar la Municipalidad de Talcahuano a la familia del menor Rodrigo Cortés Pino, quien falleció el 17 de mayo de 1998 producto de lesiones atribuibles a “bullying”.
Así lo determinó, de forma unánime, la tercera sala de la Corte Suprema, que desestimó el recurso de casación que había sido interpuesto por el municipio contra la sentencia, dictada en 2009, por la Corte de Apelaciones de Concepción. Los $70 millones irán a la madre, Tatiana Pino, y los hermanos del niño, por los daños morales que su muerte les ocasionó.
Se menciona que, al ser el recinto educativo dependiente de la administración pública, el municipio no proveyó las condiciones para que un hecho de esta naturaleza no ocurriera. El fallo del máximo tribunal determina que “no hubo vicios al establecer la responsabilidad extracontractual que tiene el municipio en este caso”.
El menor Cortés, dos días antes de su deceso, tuvo un altercado con un compañero, mientras cursaban el 8º básico A de la Escuela E-470, recibiendo golpes de puños y de un objeto contundente. Luego se sintió mareado y sufrió vómitos, pero no fue enviado de inmediato a un centro médico. Sólo cuando le siguieron las molestias y él contó en su casa que lo habían golpeado, fue llevado de urgencia al Hospital Regional , donde se le detectó un traumatismo encéfalo craneano y fue operado, pero ya no había nada que se pudiera hacer por salvarlo.