
Fiscalía no descarta pedir extradición del ministro del Interior de Venezuela por secuestro y homicidio de Ronald Ojeda
El persecutor Héctor Barros aseguró que el secuestro y asesinato del exteniente venezolano fue un encargo político del gobierno de Venezuela, y señaló directamente a Diosdado Cabello como autor intelectual del crimen.
El fiscal jefe de la Región Metropolitana Sur, Héctor Barros, afirmó este lunes que el secuestro y posterior asesinato de Ronald Ojeda, exmilitar venezolano disidente refugiado en Chile, fue un encargo político del gobierno de Venezuela, y apuntó directamente a Diosdado Cabello, actual vicepresidente del PSUV y uno de los hombres fuertes del régimen de Nicolás Maduro, como autor intelectual del crimen.
“Particularmente, quien habría pagado y encargado este delito concretamente al Tren de Aragua apuntan a Diosdado Cabello”, sostuvo Barros en una entrevista con Canal 24 Horas.
El persecutor explicó que la investigación ha reunido evidencias que refuerzan la tesis de un asesinato con motivaciones políticas, lo que, de confirmarse judicialmente, convertiría este caso en uno de los más graves atentados políticos cometidos en suelo chileno en las últimas décadas.
Extradición en evaluación
Pese a que la Constitución venezolana prohíbe la extradición de sus ciudadanos, el fiscal no descartó iniciar un proceso formal de solicitud. “Se podría pedir respecto de él en la medida en que sigamos avanzando en la investigación y los antecedentes puedan robustecerse”, explicó Barros, dejando abierta la posibilidad de que Chile solicite la cooperación internacional para enfrentar un hecho que tiene repercusiones diplomáticas de gran alcance.
Logística del Tren de Aragua
En la misma línea, el fiscal detalló que Edgar Benítez Rubio, alias “El Fresa”, tuvo un rol clave en la logística operativa del Tren de Aragua, organización criminal transnacional a la que se le atribuye la ejecución del crimen. Benítez habría facilitado vehículos utilizados para el secuestro, así como apoyo directo a los responsables.
El caso Ojeda se ha caracterizado por su nivel de planificación y por la violencia utilizada. El exteniente fue secuestrado por individuos que se hicieron pasar por agentes de la PDI, no se exigió rescate alguno, y su cuerpo fue hallado enterrado bajo cemento, en un modus operandi que el Ministerio Público considera inédito en Chile y propio de asesinatos políticos planificados.
“Si tengo dudas si es un crimen político o no, jamás. Aquí hay antecedentes claros que apuntan hacia Diosdado Cabello”, sentenció Barros.
Un crimen que sacude a Chile y Venezuela
El asesinato de Ronald Ojeda —quien había recibido asilo político en Chile tras escapar de prisión en Venezuela— ha causado conmoción tanto en el país como en la comunidad internacional, generando fuertes cuestionamientos al actuar del régimen de Maduro y la posibilidad de que el crimen haya sido ejecutado con apoyo de redes criminales operando en el extranjero.
La causa, que aún está en etapa investigativa, se perfila como uno de los casos más delicados para la diplomacia chilena, pues, de confirmarse el vínculo directo con un alto funcionario del chavismo, se abriría un escenario complejo en términos jurídicos y políticos.
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