Guillermo Teillier, presidente PC: “No aceptamos que por el trascendido de una posible relación con las FARC se criminalice la movilización social”

Si las hubo en el pasado, vinculaciones, ¿qué grado alcanzaron y cuál era el objetivo?

Las relaciones siempre fueron de carácter político y nada más, lo mismo que hemos hecho prácticamente con todas las fuerzas políticas latinoamericanas; centro, izquierda e incluso de derecha y ese es el único tipo de relación.

¿Qué le parece este emplazamiento público que han hecho parlamentarios y medios de comunicación para que usted y el PC en general “expliquen” las vinculaciones con las Farc?

Esta es una maniobra burda y de baja categoría que no tiene ninguna trascendencia.

¿Qué hay detrás de las acusaciones? Se habla de que la derecha quiere meter una cuña entre ustedes y la Concertación…

Esto es más que evidente y se sustenta aún más con lo que han declarado los propios personeros de gobierno y de derecha, porque lo que finalmente buscan es despejar el camino para criminalizar la movilización social y sobre todo, al decir que hay nexos terroristas, van a aplicar esta ley antiterrorista al pueblo mapuche.

Esto lo hacen en el momento preciso en que organismos internacionales de derechos humanos están pidiendo cuentas al gobierno chileno por no terminar con la opresión hacia el pueblo mapuche y por no cumplir con el artículo 169 de la OIT.

¿Cuál es su opinión respecto a las detenciones y allanamientos de los últimos días?

Se está buscando a personas que han puesto bombas, y, aunque yo no estoy de acuerdo con el uso de éstas, sí siento que esto es parte del “mensaje” que hace el gobierno para instalar su nueva maquinaria represiva y para eso, tiene que instalar a terroristas en el país y mostrarlos para justificar la manera brutal en que está actuando contra los estudiantes y contra los trabajadores. Es una estrategia de Piñera de magnificar los hechos, buscando justificaciones.

Hay una situación en Latinoamérica que viene de sectores reaccionarios de Estados Unidos que pasan por Colombia y que aprovechando el famoso dossier que nadie sabe lo que dice o no, instala en varios países este mismo tipo de política represiva con lo que indudablemente, la derecha busca varios objetivos, pero principalmente, y a lo que le tiene más pánico, es a que logremos la unidad de fuerzas progresistas en Chile, con lo que las posibilidades de seguir gobernando en otro periodo, tendrían los días contados y se extinguiría.

PRECARIEDAD LABORAL

¿Qué nos ha mostrado la situación en la mina San José?

La Mina San José ha demostrado la precariedad con la que trabajan los mineros chilenos, sobre todo los del subcontrato, en minas que le dan tanta riqueza a unos pocos que acumulan, mientras muestran la desigualdad y con hechos concretos que los mineros están desprovistos de sus derechos.

¿A qué obedece principalmente la precariedad en seguridad laboral que aparece en estas tragedias?

Obedece en primer lugar a la ambición usurera que tienen muchos grandes empresarios chilenos y por otra parte, a las debilidades que han presentado los gobiernos y el Parlamento en los últimos 20 años, quienes no han sido capaces de legislar a favor de los trabajadores.

¿Cree que efectivamente se tomarán medidas que afecten la rentabilidad de las empresas mineras?

En realidad las multas no afectan en nada a las empresas, porque los empresarios prefieren pagarlas a invertir y así, entregarles seguridad a los trabajadores, por lo tanto, tiene que cambiar drásticamente la legislación y es ahí donde yo tengo la gran duda de si este gobierno va a tomar la iniciativa de legislar para que realmente sí se afecte la rentabilidad de las mineras en caso que no cumplan con las condiciones laborales. Deben mandar un proyecto de ley sobre los derechos de los trabajadores, sobre todo los mineros, que sea drástico no en multas, sino que sencillamente, cerrarlas cuando no cumplan con las normativas laborales que además están estipuladas en tratados internacionales y que en otros países se respetan muy rígidamente.

¿Qué dice el PC hoy al llamado a la unidad de la oposición para las municipales del 2012?

Como PC pensamos que es necesario actuar unidos como oposición, eso es imprescindible, aún cuando es importante señalar que no formamos ni formaremos parte de la Concertación, porque somos parte del Juntos Podemos y de la izquierda, pero desde el lugar que nos corresponde, haremos todo lo posible por avanzar, en base a los puntos que logramos concordar con Eduardo Frei para la segunda vuelta, puntos que están plenamente vigentes y que son factibles.

Debemos avanzar desde las municipales hacia la presidencial en un programa único; podrán inscribirse uno o dos candidatos, pero lo esencial es que nos pongamos de acuerdo en ese programa de transformaciones y que, además, los partidos de la Concertación tengan la capacidad de realizar una autocrítica profunda y que planteen al país las correcciones que están dispuestos a llevar adelante y plantear su disposición en los temas que realmente le interesan a la mayoría de los chilenos y que como ha quedado de manifiesto, los chilenos han dicho que la Concertación no había cumplido con esas expectativas y está claro que la derecha también se aprovecha de eso.

¿Sobre qué bases están dispuestos a negociar un acuerdo electoral?

Tiene que asignarse a cada partido lo que tiene como fuerza representativa y cada partido o conglomerado por separado tendrá que ver la fórmula para elegir candidatos, para que luego, entre todos, hagamos el máximo esfuerzo para llevar los candidatos que mejor nos representen a cada sector y si tiene que haber competencia en algunos lugares, tendrá que existir, pero nos parece que la democracia y la no exclusión significan también que tienen que coincidir tanto las mayorías como las minorías para que todos estén representados y tengan acceso.

¿No teme que el PC, al acordar con la Concertación y ya no estar excluido, tienda a ser confundido con las políticas que aplicaron los gobiernos anteriores?

No, y es por eso que nosotros estamos hablando de condiciones que tenemos para poder llegar a un acuerdo y precisamente somos críticos de las políticas anteriores y decimos que queremos un gobierno de nuevo tipo que no sea ni lo que tuvo hasta ahora la Concertación ni mucho menos, uno de derecha.

¿Cómo piensan diferenciarse?

Como lo hemos hecho siempre, pero no necesitamos diferenciarnos en todo, porque lo que vamos a privilegiar es aquello en lo que estemos de acuerdo. Ahora, hay diferencias profundas con algunos partidos por ejemplo, en política internacional; con otros hay diferencias respecto de políticas tributarias, además, creo que hay diferencias sobre cómo tratar nuestras riquezas básicas, pero la gracia está en buscar más bien qué cosas nos puedan acercar y así tener un avance programático y lo demás será objeto de discusión en el parlamento y en la movilización social, pero nosotros siempre vamos a mantener nuestra independencia.