Camilo Catrillanka: víctima de la militarización de la Araucanía.

Llama la atención el cómo se ha abordado por parte del gobierno el caso del asesinato de Camilo Catrillanka, comunero mapuche, asesinado el pasado 14 de noviembre por miembros de carabineros, que forman parte del “Comando Jungla” grupo entrenado especialmente para procedimientos en localidades rurales.

Por Raúl Saldívar Auger, Diputado PS

Ellos recibieron instrucción en la selva de Colombia y su objetivo es combatir el supuesto terrorismo que se vive en la zona de la de la Araucanía. Sus incursiones en las comunidades mapuche han dejado niños heridos y el repudiable asesinato de Camilo Catrillanka, asesinado de un balazo en la nuca mientras iba conduciendo su tractor, y recibió además ráfagas de metrallas.

Ante estos hechos, el Subsecretario Ubilla dio respuestas erráticas, no supo dar explicaciones el por qué se utilizó ese nivel de violencia contra dos mapuches. de inmediato dieron de baja a los carabineros involucrados, quienes confesaron que habían disparados al menos 26 veces y más encima, rompieron las cámaras que portaban.

Diputado Raúl Saldívar

Más allá de los lamentables hechos, de los que deberán dar cuenta las autoridades de Gobierno, llama la atención las declaraciones del Subsecretario Ubilla a la prensa. No dedicó un segundo a explicar el por qué funcionarios del comando que tiene supuestamente una misión específica–la lucha contra el terrorismo–se involucró con tanta violencia en un supuesto delito común. Pues no debemos olvidar que, según carabineros, Catrillanka y su acompañante habían robado un vehículo particular. Esto no es más que violencia desmedida y criminal hacia el pueblo mapuche, porque en el resto del país, un delito de estas características no concita el mismo interés en la policía.

Además, resulta cuestionable los giros lingüísticos usados por Ubilla, porque para él Catrillanka es un chileno más, la lamentable muerte de un compatriota y que lo lamentan mucho. Incluso anunciaron querella para quienes resulten responsables.

Ubilla, utilizando maliciosamente recursos discursivos le resta conflictividad al asesinato de Catrillanka y así busca despolitizar el conflicto. Desconoce un rasgo fundamental de la víctima, su pertenencia al pueblo mapuche, que lo definió como persona. Camilo Catrillanka además de chileno fue un “comunero” mapuche de la comunidad Temucuicui. Ubilla busca desconocer el conflicto histórico que hay entre el Estado de Chile y el pueblo mapuche. Para la autoridad, Camilo es uno de los tantos chilenos más que muere en la Araucanía, ya que, según él ésta es una zona que concentra no sólo la pobreza, sino que concentra además los hechos de violencia. Lo que nos muestra que, uno: o desconoce la historia de nuestro país o dos: que asocia pobreza y vulnerabilidad a la delincuencia. Al parecer, son ambas.

Para el Subsecretario Ubilla la Araucanía tiene rasgos especiales que naturalizan la violencia y responsabiliza de esto al escaso desarrollo alcanzado por sus habitantes y a que sus habitantes viven en una zona de rezago. No obstante, no hace ninguna alusión al origen de la pobreza de la zona, a los más de quinientos años de violencia por parte de los invasores: primero por el imperio español y luego por el Estado de Chile, que fue acorralando al pueblo mapuche a pequeñas reducciones, el verdadero origen del conflicto, algo que se debe reconocer y buscar una solución de raíz.

Si el subsecretario Ubilla tuviera razón y la violencia policial es en base al nivel de violencia vivida en la región, no sería la Araucanía la zona militarizada, ya que, de los 449.374 detenidos del año 2017, sólo 21.865 fueron en esta zona. Siguiendo esta perspectiva, la zona de Camilo Catrillanka no amerita en lo absoluto el aparataje policial y la violencia ejercida por carabineros, puesto que las regiones más conflictivas son Tarapacá, Antofagasta y Atacama. Es decir, el Subsecretario usa fundamentos falaces para solapar el carácter político de la militarización de la Araucanía, disfrazado de Plan Araucanía.

Para terminar, quisiera decir que el asesinato del comunero Camilo Catrillanka no sólo debe ser esclarecido y buscarse los responsables. Este hecho debe ser un punto de inflexión para cambiar la relación entre los pueblos que habitan nuestro país y colaborar así para el reconocimiento y fomento de la multiculturalidad de Chile, especialmente de la cosmovisión y las formas de organización del pueblo Mapuche.

1 comentario
  1. Julio Piñones Lizama dice

    Es un muy buen artículo, claro y documentado, sobre la dramática situación que vive el pueblo mapuche, despojado de sus tierras y sumidos en la pobreza, la marginación y la violencia sistemática del Estado de Chile. La actuación del gobierno actual ha intensificado esta mala política y debe dar cuenta política de lo obrado por ellos.

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