Sergio Bitar: “Estamos frente a un Presidente muy experto en letra chica, que la gente no lee y nosotros tenemos que ponerle lupa”

¿Qué han sacado en limpio hasta ahora?

Todos van entendiendo, a medida que pasan las semanas, que el ciclo de la Concertación se cerró y se inicia uno nuevo, cuya característica tenemos que ir observando, articulando acuerdo en torno a ideas de futuro y a la supervisión de lo que hará este gobierno. Tarea no fácil, porque es un gobierno que tiene una agenda pública que se ve como un gran árbol de Navidad, pero tiene una agenda privada que es distinta, entonces tenemos que supervisar esa diferencia entre ambas.

Cuando dice que el ciclo de la concertación –como la que conocimos– se cerró, ¿a qué se refiere?

El gran desafío que nos impusimos en los 80, de recuperar la democracia, de construir un país con unidad, con proyección internacional, desarrollo económico, científico tecnológico, protección social, amplitud cultural, con una visión más racional y más liberal de la vida y el derecho de las personas, eso se ha logrado en gran medida, tanto así que  marca al gobierno de derecha de Piñera, en una buena parte, a juzgar por su mensaje, de manera que ahora empieza otro ciclo. No es el eje democracia-dictadura, es el tipo de democracia y el tipo de sociedad. Eso requiere de más finura y de más imaginación.

¿Siempre pensando que esta coalición debe enfrentar unida las elecciones municipales del 2012?

El eje del debate, que se viene desarrollando hace mucho tiempo, el reordenamiento, también va a hacer un proceso. Respecto a la Concertación como fuerza con capacidad de renovación, confío en ella y el esfuerzo que estamos haciendo es ponerla en mejor pie para las municipales, pero no la misma coalición de los cuatro partidos, tiene que tener mecanismos de organización de la sociedad civil nuevos, la  integración de otros grupos sociales y políticos, en un acuerdo más amplio para rehacer mayoría.

¿Hasta cuándo considera prudente que la Concertación siga debatiendo sobre por qué perdió las elecciones pasadas?

Estos procesos no sólo van a marcar ahora los debates internos de los partidos en las elecciones, incluso se pueden intensificar después, con las nuevas directivas, porque va a venir un gran esfuerzo por diseñar una oposición atractiva para el país como alternativa para el 2012 y 2013, y positiva, porque la gente no quiere peleas ni picados. Te toma uno o dos años si lo hacemos bien. Estamos obligados a discutir sobre lo que hicimos mal para hacer mejor lo que viene.

¿Cuál será la tarea de las nuevas directivas?

La propuesta es hacer un análisis de qué hicimos bien y qué no. Qué está haciendo este gobierno de una manera distinta, no es la derecha ideológica que uno podría haber presumido hace 10 años, no es una UDI refractaria. Estamos frente a una derecha empresarial, pragmática, con atisbos centristas, por el origen político del presidente, que viene de una familia democratacristiana.

Es un país que está rumbado en otra línea. Él ganó la elección porque se acercó a la Concertación y el mensaje va en esa misma línea; eso plantea un desafío mayor. Yo lo encuentro una oportunidad de decir, no porque toma mis banderas, sino hágalas y yo lo voy a apoyar si las banderas las toma como corresponde. No diga que quiere darle derecho voto a los chilenos en el exterior, si después dice que no es para todos, o que va a mandar una reforma tributaria como la que mandó y al final ésta va a generar menos ingresos para el Fisco.

Tenemos que fiscalizar que lo que se dice, lo hace. Que No hay dobles agendas y analizar la credibilidad de esto –donde tenemos serias dudas–, pero al mismo tiempo hacer un relato de lo nuevo que queremos para el Chile de los próximos años.

Dijo que Piñera tomó las banderas de la Concertación. Pablo Longueira, al contrario, señaló que fue ésta la que recién se había dado cuenta que estaban gobernando con las ideas de la Alianza por Chile…

Siempre me llama la atención Longueira porque tiene sentido del humor…

¿Cuánto se juega, en las internas partidarias, la candidatura presidencial del 2013?

Es muy prematuro, la gran preocupación ahora es qué es ser progresista al 2010 para el 2020. Cuál es una Agenda en materias nuevas, verdaderas, en medio ambiente, de la energía, participación de la juventud, mejoramiento de la educación pública y superior. Hay un conjunto de áreas allí, muy trascendentes para el futuro de un país que tenemos que replantear, rediseñar y no quedarnos con lo actual. Lo que hace Piñera, en algunas propuestas, es que complementa y termina cerrando lo que estábamos haciendo nosotros, pero eso no basta para pensar el país del futuro.