Se considera móvil “pasional” en asesinato de Arancibia Clavel
Impacto causó la noticia del asesinato del ex agente de la DINA. Su cuerpo tenía entre 15 y 20 puñaladas, y se encontraba en el suelo de su departamento de Buenos Aires. Aún se desconocen las razones, pero suena con fuerza la tesis de un crimen pasional, la que está siendo considerada por la Policía argentina.
El ex agente de la DINA, Enrique Arancibia Clavel (66), cumplía condena en Buenos Aires por el doble asesinato del General Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthbert, ocurrido en dicha ciudad en 1974. Debido a una cláusula –ya derogada-, la justicia argentina había resuelto darle libertad condicional, ya que los años que pasó en prisión antes de ser condenado le valían “dos por uno”. Arancibia era homosexual, dueño de una flota de taxis en la capital trasandina, y vivía en un departamento en el centro de la ciudad. El mismo donde la noche de ayer fue encontrado muerto y con más de 15 puñaladas en el cuerpo.
El joven que encontró a Arancibia, -quien según Clarín era su pareja-, declaró que fue un asesinato “brutal” y que tenía “intestinos en su mano”, según recogen medios nacionales. El diario argentino señaló que el cuerpo se encontraba “en posición cúbito dorsal (boca arriba), con más de 20 puñaladas en el pecho y en la espalda”, según habría indicado la Policía Federal de Buenos Aires. Dichas fuentes indicaron también que presentaba sangre seca, por lo que el crimen se habría cometido días antes de encontrarse el cadáver.
Las tesis ya comenzaron a circular, y la que suena con más fuerza entre la prensa trasandina es la de un crimen pasional, que está siendo considerada por la Policía Federal. Clavel era homosexual, y se dice que vivía con su pareja en el departamento en que fue encontrado. La Policía determinó que no había signos de robo, y la puerta no había sido forzada. El otro móvil que se considera es su labor como agente de inteligencia durante la dictadura de Pinochet.
Las reacciones al hecho no se hicieron esperar. La abogada de la familia Prats, Pamela Pereira, dijo en CNN que “Arancibia Clavel es muy conocido en Argentina en vista del quehacer represivo y sus vinculaciones a una realidad muy oscura de la sociedad Argentina”, y pidió investigar su pasado y las vinculaciones que había desarrollado en Buenos Aires.
El ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter dijo que como Gobierno “nos conmueve el asesinato” y que solicitarán a la embajada chilena en Argentina los antecedentes del hecho para poder tomar las medidas correspondientes, informó Radio Biobío. La familia del General Carlos Prats, en tanto, declinó referirse al hecho. Su hija, Cecilia Prats, sólo declaró a la prensa que la noticia fue “impactante”.
Quien sí dio su opinión fue la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, quien en entrevista con Canal 24 Horas señaló que Arancibia murió “en la impunidad” y sin ser juzgado por la justicia de nuestro país.
Clavel también participó del secuestro de las chilenas Laura Elgueta Díaz y Sonia Díaz Ureta, en el marco del Plan Cóndor, llevado por las dictaduras latinoamericanas para perseguir a sus opositores de izquierda.