Filósofo español advierte sobre gran problema contemporáneo y que habita en las RRSS: el idiota hipermoderno
José Carlos Ruiz habla sobre esta temática en su ensayo "Filosofía ante el desánimo" (Destino), donde invita a los lectores a debatir sobre la sociedad hipermoderna y la aproximación de la filosofía a lo cotidiano.
Por Valeria Urra
El Doctor en Filosofía por la Universidad de Córdoba y experto en Filosofía de la Cultura y pensamiento crítico, José Carlos Ruiz, cree que el aumento de los “idiotas supermodernos” se debe a que no necesitan contrastar informaciones, se centran en reafirmar sus creencias y creen vital hacerlas públicas en redes sociales, llegando a ser un «problema contemporáneo» cada vez será más apremiante.
Este tema, aparecido en el diario catalán La Vanguardia, es solo uno de los que comenta en su ensayo «Filosofía ante el desánimo» (Destino), donde, con una mirada quirúrgica, disecciona la época en la que vivimos y cómo se desarrolla este mundo de forma cada día más complejo.
En el documento además invita a los lectores a debatir sobre la sociedad hipermoderna y la aproximación de la filosofía a lo cotidiano.
«El idiota hipermoderno es un problema contemporáneo que va a ser más acuciante porque los algoritmos de las redes sociales no están por la labor de ofertarte una pluralidad en la visión del mundo sino de reforzar tus intereses y eso es lo que está conduciendo al aumento de ese perfil», indicó Ruiz en una entrevista con Efe.
Afirma que este personaje no necesita contrastar informaciones porque se somete a su sesgo de confirmación, y tacha de conspiración, manipulación o falsedad cualquier evidencia que pudiera negar o poner en duda aquello de lo que está convencido: «como buen idiota pierde la capacidad de escuchar al otro, que piensa diferente a él».
Y se pregunta: «¿dónde hay que poner el foco de la responsabilidad, en las empresas que intentan captar tu atención y someterla el máximo tiempo posible porque le es rentable o en los procesos políticos, en nosotros mismos, porque no abogamos porque en la educación infantil y primaria se ponga una asignatura de pensamiento crítico?».
El filósofo cree por eso que puede aceptarse que hay un interés latente de parte de los empresarios para querer tener a la sociedad presente en las redes sociales todo el tiempo. Sin embargo, agrega que se debe aceptar que «no hay ningún interés en los políticos de educar en el pensamiento crítico».
De ahí la importancia de analizar el mundo actual bajo la lógica del pensamiento crítico, porque, de lo contrario, se configura una identidad abocada a experimentar un desánimo crónico, señala en La Vanguardia.