El Sindicato N° 1 de Trabajadores de Minera Escondida emitió un comunicado en el que, entre otras cosas, señala que tras analizar las condiciones de la última oferta de la empresa, controlada por la anglo- australiana BHP, se ha constatado que «la misma busca aumentar los tiempos de trabajo, disminuir descansos, modificar las jornadas de trabajo, aplicar medidas que afectan la protección de trabajadores enfermos y contraindicados, entre otros aspectos, que persiguen incrementar aún más la productividad y las ganancias de la empresa minera más rentable del mundo».
Señalan que «ninguno de los temas principales de los trabajadores ha sido acogido».
Por ello convocaron hoy a «todas sus socias y socios a concurrir los días 29, 30 y 31 de julio, a votar de manera masiva el rechazo de esta última oferta, a fin de declarar la huelga legal, única herramienta que en este escenario nos queda a los trabajadores para presionar por una urgente rectificación en la manera de hacer las cosas por parte de la administración de la Empresa».
El 2017, una huelga de 44 días en Escondida, generó una baja en la producción de cobre de dicha faena del 21% ente los meses de enero y septiembre en relación con el año anterior. La medida de fuerza, además, impactó fuertemente en el Imacec.
El mismo sindicato hoy está solicitando el establecimiento de un sistema de desarrollo de carrera objetivo y oportuno, en la fijación de compensaciones variables en base al desempeño, el término de distinciones de clase en los beneficios educacionales de los hijos de los trabajadores y de los supervisores.
De acuerdo al sindicato el ofrecimiento de bonos, por única vez, «sólo intentan pagar el mayor tiempo de trabajo, nuevos requerimientos operacionales y de jornadas y adicionales exigencias de gestión, todos ellos contemplados en la propuesta de la Empresa».
La empresa, según el comunicado, «se niega a reconocer el gran aporte que han hecho los trabajadores durante todos estos años, en especial por el compromiso de estos durante la pandemia, que ha permitido enfrentarla exitosamente.
Según ellos «el equivalente al 1% de los dividendos que han recibido los dueños, como un bono de reconocimiento por única vez a distribuirse entre todos los trabajadores, es completamente razonable. Es preferible que este mínimo porcentaje quede en beneficio de chilenos y no se vaya al extranjero, más aún ante la inexistencia de un royalty real».
Los trabajadores señalan que quisieron «privilegiar el diálogo interno en las mesas de conversaciones, pero nuevamente la Empresa con esta última oferta opta por imponer condiciones y cerrar la puerta a la construcción de acuerdos satisfactorios».
Para el sindicato «las circunstancias favorables de la industria y en particular de la Empresa, no le da a esta excusas para no responder favorablemente nuestras razonables peticiones. Minera Escondida proyecta ingresos por más de 10.000 millones de dólares este año. La responsabilidad de evitar un grave conflicto está totalmente en las manos de la transnacional BHP».