Cifras de cepa Delta del COVID-19 impiden recuperación del petróleo
Los precios del petróleo continúan su escenario a la baja, al final de la semana pasada y al comienzo de esta continúan mostrando una dinámica negativa, causada en gran medida por la propagación de la nueva cepa Delta del coronavirus.
Las estadísticas de nuevos contagios, hospitalizaciones y muertes son alarmantes, con varios países reanudando las cuarentenas. Claro está, que esta situación representa una amenaza para la recuperación de la demanda del petróleo y de sus derivados.
Los futuros del Brent cotizaron nuevamente por debajo de los 70 dólares por barril la semana del 16 de agosto. Después de un repunte de los mínimos de tres meses, las cotizaciones volvieron a bajar y formaron una tercera vela bajista consecutiva. Con tal imagen, la probabilidad de otra prueba del nivel de soporte de 67.5 es bastante alta y si es perforada, los compradores pueden tomar la iniciativa en la zona de 64,5-66 dólares por barril.
El banco de inversión Goldman Sachs comentó sobre el llamado de la administración del gobierno de los Estados Unidos para que la OPEP+ aumente su producción. Según los expertos del banco, la alianza petrolera no revisará sus planes para aumentar la producción en medio de la rápida propagación del COVID-19. Al mismo tiempo, los productores de petróleo tampoco desean cancelar el aumento previsto de 2 millones de barriles diarios para el fin de este año. En general, los analistas de Goldman mantienen una perspectiva optimista sobre los precios del petróleo, aunque los pronósticos de un déficit a corto plazo se revisaron de 2,3 millones a 1 millón de barriles diarios.
A principios del presente año, 2021, los pronósticos de Goldman Sachs se encontraban entre los más precisos entre los principales bancos de inversión. Desde principios del año, el banco se ha mostrado optimista sobre los precios del petróleo, estableciendo el objetivo más alto, de 55 dólares por barril. Al mismo tiempo, al final del primer trimestre del año, el banco ya admitió el crecimiento de las cotizaciones en el período de verano a los 70-80 dólares por barril. Tal precisión puede aumentar la confianza de los participantes del mercado en los pronósticos futuros del banco, aunque el éxito pasado no garantiza en absoluto que los modelos del pronóstico continuarán mostrando resultados tan precisos.
Baker Hughes presentó el viernes 13 de agosto datos nuevos sobre la actividad de la perforación y producción en los Estados Unidos. El número de plataformas petrolíferas activas aumentó a 397 unidades, con un incremento de 10 plataformas activas. Esta es la mayor ganancia semanal de los últimos tres meses. Canadá también experimentó un crecimiento con 100 instalaciones, con un aumento de 5 plataformas.
La actividad de perforación se está recuperando gradualmente, pero el ritmo no nos permite esperar que la producción petrolera en los Estados Unidos a fin de año pueda superar significativamente las proyecciones de alrededor de 11,4 millones de barriles diarios, según los pronósticos de la EIA.
En resumen, si continúa el aumento de los contagios por la nueva cepa del COVID-19, muchos países entraran nuevamente a cuarentenas y disminuirá la demanda del petróleo y sus derivados, lo cual traerá nuevamente una caída de los precios del petróleo.
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