Cantante mexicano de música ranchera Vicente Fernández fallece a los 81 años

La carrera de "Chente", como lo apodaban en México, además de los éxitos musicales, estuvo plagada de situaciones como blanqueo de dinero del narcotráfico colombiano, comentarios homofóbicos y adicción al alcohol.

El cantante y actor mexicano Vicente Fernández, ídolo de la música ranchera, falleció este domingo a los 81 años de edad en la ciudad de Guadajalara (centro), por las secuelas de una caída y neumonía, lamentó el presidente Andrés Manuel López Obrador.

«Transmito mi pésame a familiares, amigos y millones de admiradores de Vicente Fernández, símbolo de la canción ranchera de nuestro tiempo, conocido y reconocido en México y en el extranjero», escribió el gobernante en su cuenta de Twitter.

La familia del artista, publicó un mensaje poco antes en su cuenta de Instagram anunciando la noticia: «Lamentamos comunicarles su deceso el día domingo 12 de diciembre a las 6.15 am (12.15 GMT)».

Fernández estaba en terapia intensiva del Hospital Country 2000 de Guadalajara, capital del estado de Jalisco.

«Fue un honor y un gran orgullo compartir con todos una gran trayectoria de música y darlo todo por su público. Gracias por seguir aplaudiendo, gracias por seguir cantando», añade el anuncio.

El mensaje enfatizaba que el cantante ranchero «sigue siendo el rey», como versaba uno de sus mayores éxitos musicales.

Su vida no estuvo exenta de polémicas. En enero pasado se viralizó un vídeo de 2017 en el que aparecía el cantante, de 80 años, tocándole un pecho a una fan con la que se estaba tomando una foto. Las imágenes se compartieron rápida y masivamente a través de las redes sociales provocando una ola de indignación, a la que se sumaron otras seguidoras compartiendo episodios similares.

«Realmente no me di cuenta hasta que vi la foto e hice zoom. Me sentí superviolentada, superenojada. Él no debió tocar mi cuerpo sin mi permiso. Estoy segura de que muchas mujeres han experimentado lo mismo», confesó la mujer con la que se desató el escándalo en una entrevista.

«Acosar es que yo la haya llevado a una caballeriza y que yo le haya bajado la blusa, eso es acoso. Pero lo que pasó fue un accidente con ella», se defendió Fernández, tratando de restarle importancia al incidente.

«Puse mi mano, primero en el estómago y dije ‘en el estómago se va a sentir ofendida’, y subí mi mano y toman la foto. Si algo tengo es respeto al público. Pero sí quiero pedirle una disculpa a todos los medios porque siempre me han tratado muy bien en toda mi carrera y no porque hice un… reconozco que hice mal, no sé si fue bromeando, fue una broma… no sé», añadió.

Durante una entrevista, celebrada en su rancho, el cantante dijo entre lágrimas: «Le ofrezco una disculpa [a la chica] de todo corazón, pero no lo hice con intención. Si lo hubiera hecho con intención, no lo hago allí, la hubiera llevado a las caballerizas».

Respecto a las otras denuncias, reconoció que no las había visto. «También ellas me agarraban, me abrazaban y me llegaron a decir que nos hiciéramos una foto dándonos un beso, y yo me dejaba, pero con la boca cerrada».

El cantante de rancheras y mariachis, ganador dos Grammy y de ocho Grammy Latinos, además de vender más de 75 millones de discos en todo el mundo, también quiso disculparse con su mujer y sus hijos.

La carrera de «Chente», como lo apodan en México, está plagada de situaciones como blanqueo de dinero del narcotráfico colombiano, comentarios homofóbicos y adicción al alcohol.

BATALLA POR LA SALUD

La salud de Fernández se deterioró en los últimos años: superó un cáncer de próstata en 2002, la extirpación de un tumor de hígado en 2012, una trombosis que le hizo perder la voz en 2013, y una cirugía de hernias abdominales en 2015.

En agosto pasado sufrió una caída que le causó una lesión en sus vértebras cervicales, que obligó a los médicos a una cirugía.

Su estado de salud era «grave pero estable», pero con asistencia ventilatoria en terapia intensiva.

Días después la familia informó que padecía del síndrome de Guillain-Barré, en el que el propio sistema inmunológico ataca los nervios y puede producir parálisis, pero esa afección fue adicional a su caída.

El 15 de agosto fue objeto de una traqueotomía para respirar, y 15 días después fue necesaria una sonda de alimentación.

El parte médico de finales de septiembre indicaba «estado neurológico es de despierto, con interacción constante con su familia y equipo médico».

El 27 de octubre salió de terapia intensiva, pero tres días después volvió por una neumonía.

Después del anuncio de su deceso llegaron al hospital su esposa, doña Cuca de Fernández, su hijo Alejandro y nietos.

En seis décadas de carrera artística vendió más de 67 millones de discos, y en noviembre pasado recibió el Grammy Latino, por el Mejor Álbum de Música Ranchera «A mis 80´s».

En 2016 ofreció un concierto de despedida en el Estadio Azteca de la capital. (Sputnik y Télam)

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