MSF denuncia denegación de acceso médico a Yenín por parte de Israel

"Las incursiones en el campo de Yenín han empezado a seguir un patrón familiar: las ambulancias han sido embestidas por vehículos blindados y se ha negado sistemáticamente la entrada y salida del campo a pacientes y personal sanitario".

La organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF) ha denunciado este martes la denegación de acceso médico en la ciudad cisjordana de Yenín (norte) por parte del Ejército de Israel en el marco de la operación lanzada el lunes en el lugar, que ha dejado hasta ahora diez palestinos muertos y cerca de un centenar de heridos.

«Las incursiones en Yenín son cada vez más frecuentes y su intensidad parece alcanzar nuevas cotas. Hemos atendido a varios pacientes con heridas de bala en la cabeza y hemos recibido a 55 heridos», ha afirmado la coordinadora de operaciones de MSF en Yenín, Jovana Arsenijevic.

«Llevamos más de 15 horas trabajando y siguen llegando pacientes. Se trata de una operación militar de una duración sin precedentes y, sin embargo, sigue habiendo víctimas a las que no se puede llegar. Hay que permitir que el personal sanitario acceda sin obstáculos a los pacientes», ha agregado.

Los equipos médicos de MSF han atendido hasta el momento a 55 heridos en el marco de la operación, la mayor llevada a cabo en Cisjordania desde el final de la Segunda Intifada en 2002. La ofensiva ha causado además daños en estructuras sanitarias, mientras que varios botes de gases lacrimógenos impactaron en el patio del hospital Jalil Suleiman, donde trabaja personal de la ONG.

MSF ha resaltado que las excavadoras militares han destruido carreteras que conducen al campamento de refugiados de Yenín, lo que dificulta el movimiento de las ambulancias y ha provocado que los trabajadores médicos y de emergencias tuvieran que desplazarse a pie, en medio de hostilidades activas.

Asimismo, ha manifestado que todas las carreteras que conducen al campamento han permanecido bloqueadas mientras ha durado la operación militar, a pesar de la que hay pacientes «que necesitan atención» en el interior del campo de refugiados.

«Las incursiones en el campo de Yenín han empezado a seguir un patrón familiar: las ambulancias han sido embestidas por vehículos blindados y se ha negado sistemáticamente la entrada y salida del campo a pacientes y personal sanitario», ha explicado Arsenijevic.

«Sin embargo, el uso de helicópteros de ataque y de drones en una zona tan densamente poblada representa un marcado aumento de la intensidad y es indignante», ha denunciado. «Lo que vemos es que el hospital donde estamos tratando a los pacientes ha sido alcanzado por botes de gas lacrimógeno. Hay que respetar las estructuras médicas, las ambulancias y los pacientes», ha zanjado.

El aumento de las tensiones durante los últimos meses se ha saldado con la muerte de más de 185 palestinos y 25 israelíes, mientras se teme que pueda haber un estallido generalizado de violencia. Las tensiones han repuntado especialmente desde el 19 de junio, cuando una redada del Ejército de Israel en Yenín se saldó con siete palestinos muertos –incluidos dos menores– y más de 90 heridos. Apenas un día después, cuatro israelíes murieron en un ataque cerca del asentamiento de Eli.

En este contexto, cientos de colonos llevaron a cabo ataques contra localidades cisjordanas, sucesos que se saldaron con la muerte de un palestino, mientras que el Ejército israelí mató a tres palestinos –miembros de Yihad Islámica y del brazo armado de Al Fatá– en un ataque con dron cerca de Yenín. (Europa Press)

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.