Sánchez reivindica cumbres más frecuentes con CELAC

"Hoy más que nunca es preciso renovar nuestra común confianza" en el multilateralismo, "singularmente en la resolución pacífica de los conflictos, en los principios de Naciones Unidas, en la protección de los Derechos Humanos, en el respeto a la integridad territorial de los Estados, en la libertad de los pueblos", ha reivindicado.

El presidente de España, Pedro Sánchez, ha hecho un llamado a que no haya que esperar otros 8 años para que se produzca una nueva cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) defendiendo que «es mucho más lo que nos une» y reivindicando los beneficios mutuos para ambos bloques que tendría una nueva relación aún más estrecha.

En su calidad de presidente de turno del Consejo de la UE, Sánchez ha aprovechado su intervención en el comienzo de la cumbre en Bruselas para hacer «un llamado explícito a que encuentros como el de hoy no vuelvan a hacerse esperar 8 años nunca más», en referencia a que la cumbre anterior se produjo en 2015.

«No tiene ningún sentido», ha defendido, puesto que «es mucho más lo que nos une». «Tenemos sólidos nexos históricos, culturales, económicos y sociales», ha subrayado, esgrimiendo que dicho «acervo compartido es el mejor aval para renovar una alianza biregional estratégica que ofrece, si somos capaces de aprovecharlas, enormes oportunidades a las dos orillas del océano Atlántico».

«Hoy más que nunca es preciso renovar nuestra común confianza» en el multilateralismo, «singularmente en la resolución pacífica de los conflictos, en los principios de Naciones Unidas, en la protección de los Derechos Humanos, en el respeto a la integridad territorial de los Estados, en la libertad de los pueblos», ha reivindicado Sánchez, que ha expresado su satisfacción personal por la celebración de esta cumbre bajo la Presidencia de turno española.

El jefe del Ejecutivo ha querido con ello resaltar los puntos coincidentes con los países de América Latina y el Caribe ante las dificultades que está suscitando la elaboración de la declaración final de la cumbre en lo relativo al párrafo en el que se quiere hacer mención al conflicto de Ucrania, dada la divergencia de opinión con algunos países latinoamericanos.

Sánchez ha apostado por consolidar las relaciones estratégicas que ya existen y ha vuelto a ensalzar las bondades que tendría la consecución de los acuerdos comerciales con Chile, con México y con Mercosur para ambos bloques.

Asimismo, ha hecho hincapié en la agenda de inversiones públicas que saldrá de la cumbre –«hablamos de inversiones tangibles, no abstractas, generadoras de empleo formal local»– y la voluntad de fomentar también la participación del sector privado.

El presidente del Gobierno también ha puesto en valor los «profundos» lazos humanos que unen a ambas regiones, recordando que millones de europeos «encontraron refugio y libertad» del otro lado del Atlántico «en un pasado aún relativamente cercano».

«De esta cumbre debemos salir con una hoja de ruta y con un mecanismo permanente de consulta y de concertación sobre desafíos globales que afectan por igual al conjunto de nuestras regiones, como el cambio climático, como la migración irregular o la desigualdad social y territorial que sufren nuestras naciones», ha rematado.

«Hay mucho sobre lo que conversar y mucho sobre lo que aprender mutuamente en estos ámbitos para encontrar soluciones» que poder llevar a los foros multilaterales, ha añadido. (Europa Press)

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