Sánchez minimiza que la migración no esté en Declaración de Granada

Lo importante, ha destacado, es el acuerdo alcanzado en el Consejo de Justicia y Asuntos de Interior (JAI) sobre el mecanismo de gestión de crisis. "Este es el hecho relevante en términos políticos".

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha restado importancia al hecho de que finalmente no se haya podido incluir el párrafo relativo a migración en la Declaración de Granada por el bloqueo mantenido por Hungría y Polonia, señalando que sabía que era un «riesgo» cuando se incluyó el asunto en la agenda del consejo informal.

En rueda de prensa al término de la cumbre, Sánchez ha defendido que el que el párrafo sobre la cuestión haya quedado fuera «no empaña» la cita de Granada. «Sabíamos que este era uno de los riesgos», ha dicho Sánchez, cuando él y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, aceptaron la petición de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, de incluir la migración en la agenda de la cumbre.

Además, ha indicado que se trata de un consejo informal, por lo que lo que la declaración no tiene carácter vinculante como sí ocurre con los consejos formales. Lo importante, ha destacado, es el acuerdo alcanzado en el Consejo de Justicia y Asuntos de Interior (JAI) sobre el mecanismo de gestión de crisis. «Este es el hecho relevante en términos políticos», ha subrayado.

En este sentido, se ha felicitado porque ahora Consejo y Parlamento Europeo pueden empezar a negociar para que pueda haber «un acuerdo político que defina que significa la responsabilidad y la solidaridad de todos nosotros cuando afrontamos este reto europeo que es la migración».

También Michel y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, han celebrado el reciente acuerdo sobre el mecanismo de gestión de crisis. «Hace años que no habíamos avanzado en materia de política migratoria, las posturas estaban tan acantonadas que no se avanzaba», ha resaltado el presidente del Consejo Europeo.

COMUNICADO DE MICHEL

Finalmente ha sido el presidente del Consejo quien ha publicado un breve comunicado, dada la imposibilidad de que los Veintisiete avalaran la declaración porque Hungría y Polonia querían que se incluyera el veto en los temas JAI. En el mismo, se afirma que «la migración es un desafío europeo que requiere una respuesta europea».

«Es necesario abordar inmediatamente y de manera decidida la migración irregular. No permitiremos que los traficantes decidan quién entra en la Unión Europea, continuaremos implementando de manera efectiva y rápida de todas nuestras decisiones», indica el texto de Michel.

Esta comunicación también apunta otros consensos como la necesidad de reforzar la dimensión exterior, luchar contra las mafias y reforzar la cooperación con países terceros para cortar las rutas irregulares y agilizar las deportaciones.

DEBATE SOBRE AMPLIACIÓN

Otro de los grandes temas de la cumbre de Granada ha sido el de la ampliación de la UE. Respecto a esta cuestión, Sánchez ha vuelto a reiterar el apoyo de España a la ampliación. «Cómo nos vamos a oponer a que otros países que están llamando a la puerta puedan integrarse en la UE» como lo hizo en su momento España, ha afirmado.

No obstante, ha subrayado que antes de que eso ocurra va a haber que responder a «preguntas complejas y difíciles que van a exigir voluntad política» como las relativas a la toma de decisiones en la UE o el reparto de los fondos.

 

LA AGENDA ESTRATÉGICA

En todo caso, los líderes sí han logrado pactar una Declaración de Granada que apunte las bases de la agenda estratégica que tocará definir en el próximo semestre y confirma la «promesa original del proyecto europeo de garantizar la paz, la estabilidad y la prosperidad» de los europeos, basados en los principios y valores comunes y el respeto del Estado de derecho.

El texto señala el modo en que el bloque ha querido «asumir una mayor responsabilidad» en el refuerzo de la propia seguridad y defensa de la UE y en el apoyo a Ucrania, país al que seguirán respaldando «el tiempo que sea necesario» frente a Rusia.

También evocan la necesidad de repensar el modo en que la Unión Europea debe «estar preparada» para su ampliación a nuevos miembros, pero evita ninguna referencia temporal y deja claro que el bloque necesita acometer «reformas internas».

Michel, que el pasado verano sugirió 2030 como el horizonte para ese proceso, ha concedido este viernes que hay líderes reticentes a poner fecha, como hay otros partidarios de marcar el calendario, pero ha celebrado que se haya dado el paso de «poner luz al debate» y se den pasos para preparar el camino. «Se trata de no procrastinar, hay que demostrar a los que quieren unirse que somos serios, es una cuestión de credibilidad», ha zanjado. (Europa Press)

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