La cultura detrás de la ruleta
Desde siempre, ha tenido características peculiares, que le permitieron transformarse en uno de los juegos que más eligen los participantes de los casinos.
La ruleta es considerada como uno de los juegos clásicos de casino y ha sido popular desde el momento en que se creó, hace más de 150 años.
Actualmente, con la llegada del formato digital, continúa manteniéndose en el gusto de los jugadores o incluso subiendo en popularidad, pues su acceso al público general es más sencillo.
Desde siempre, la ruleta ha tenido características peculiares, que le permitieron transformarse en uno de los juegos que más eligen los participantes de los casinos.
El origen de la ruleta y su juego en los primeros casinos
La ruleta nació en Francia. El término roulette significa rueda pequeña y su invención tuvo como objetivo primordial los estudios matemáticos. Sin embargo, rápidamente se transformó en un juego de azar, que seguiría vigente en los años por venir.
A mediados del siglo XIX, unos hermanos franceses de apellido Blanc, introdujeron la ruleta en Alemania. Dicho juego, tenía un casillero a favor de la casa, el cero. Estos hermanos llevaron el juego a Montecarlo, la primera meca de juego, donde la ruleta se estableció como uno de los juegos principales.
En Estados Unidos ocurrió algo similar. La llegada del juego tuvo sus inicios en Nueva Orleans, y luego se fue expandiendo por los demás territorios. Sin embargo, esa ruleta era diferente, ya que contaba con un casillero de doble cero y un símbolo especial de un águila, representando la libertad americana. La imagen del ave fue retirada rápidamente, pero el doble cero se mantuvo, naciendo así la ruleta americana.
Para el siglo XX, tanto en Montecarlo, como en Las Vegas, tenían a la ruleta como una de las atracciones principales. Para 1970, el auge de los casinos apareció, por lo que comenzaron a expandirse por todo el mundo.
La ruleta siempre se consideró un juego social, esto quiere decir que las personas participan en grupos, alrededor de la mesa. Al no competir entre ellas, no había ningún tipo de conflicto, pues el objetivo era acertar donde caía la bola.
De esa manera, durante las sesiones de juego abundaban las charlas, los gritos de festejo, los pronósticos en voz alta y demás exclamaciones. Cada uno de los jugadores en los costados de la mesa, no solo buscaban el premio propio, sino que también festejaban los triunfos ajenos.
Además, las mesas de ruleta eran ideales para degustar de una bebida y un tentempié, especialmente durante los años 50, donde las personas vestían de gala, y era popular convivir con un trago o un cigarro.
¿Qué ocurrió con la llegada del formato digital?
En pleno siglo XXI, la llegada de los casinos en línea rompió un poco esta cultura tradicional. Hoy, los usuarios disfrutan de la ruleta online desde la comodidad de su hogar, ya sea en la computadora o dispositivo móvil. Esto impide tener contacto con otros usuarios.
Además, el formato digital está hecho de tal manera que la experiencia es individual. El jugador participa de manera aislada en su juego. Esto le da la ventaja de manejar el ritmo a su gusto y pensar con libertad sus jugadas. Hasta no apretar el botón de inicio, la ronda no comenzará. Los gráficos simulan el giro de la bola y muestran el número ganador.
La ventaja que trae el juego en línea es que como usuario, estás en libertad de hacer lo que quieras mientras juegas; puedes comer y beber a tu gusto, estar acostado en tu cama, usar la ropa que quieras, etc.
El casino en vivo: lo más parecido al juego físico
Los sitios online cuentan con un formato adicional, llamado casino en vivo. Se trata de lo más parecido a las salas antiguas de juego, que le da un toque de realismo a la ruleta. Se trata de salas de juego manejadas por un crupier de carne y hueso, que se puede ver mediante distintas cámaras en alta definición.
Este crupier se encarga de poner a girar la bola y luego indicar que número es el ganador. Existe una interfaz especial para que puedas colocar tus apuestas, y tendrás un tiempo limitado para hacerlo antes de que empiece la siguiente ronda.
El elemento más valorado de este formato es la posibilidad de participar con otros jugadores, los cuales, pueden unirse a la misma sala de juego. Gracias a un chat en vivo, es posible charlar con ellos, tanto del propio juego o de cualquier otro tema que surja. Esto permite recuperar una parte de la cultura de la ruleta, como juego social entre varias personas.