Entrevista por competencias: descifrando las habilidades esenciales de los candidatos

Las búsquedas laborales son procesos largos y cansadores. A la urgencia y ansiedad que se vive durante el tiempo que dura la falta de empleo, se le suma las dificultades que se deben sortear para alcanzar el puesto deseado. El armado del currículum vitae, de una carta de presentación, el envío a las postulaciones que se nos presentan y a las organizaciones dentro de las cuales nos interesa trabajar, es tan solo el primer paso de todos los que debemos dar.

Las mayores dificultades se viven, sin lugar a dudas, al momento en que nos convocan para una entrevista. Si bien este momento suele vivirse con alegría dado que significa una oportunidad clave para alcanzar el puesto que deseamos, es también un momento que nos despierta mucha ansiedad. No solo por las ganas de transitarla con éxito, sino también por el conocimiento sobre cómo actuar y qué debemos responder.

A pesar de que en una entrevista laboral se ponen en juego una serie de subjetividades propias de la persona o institución que nos está contratando, hay cuestiones que debemos tener en cuenta antes de enfrentar este tipo de situaciones. Por ejemplo, saber el tipo de entrevista laboral que nos van a realizar, qué metodología van a utilizar durante el proceso de contratación.

Hoy en día, una de las técnicas más utilizadas tanto por las grandes organizaciones como las empresas multinacionales es la entrevista por competencias. Este tipo de evaluación de candidatos cumple con ciertas pautas orientadas a reconocer, durante un encuentro que se desarrolla en un tiempo acotado, las principales habilidades y capacidades de la persona que se está postulando.

Por eso, si conocemos en profundidad cómo funciona esta metodología de entrevista, vamos a poder estar mejor preparados para superar con éxito el próximo proceso de contratación que enfrentemos.

¿Cómo funciona una entrevista por competencias?

Una entrevista por competencias es muy distinta a las tradicionales evaluaciones orales que se realizan sobre un candidato laboral. Su objetivo no está en conocer la experiencia laboral o académica del postulante, sino ahondar en sus habilidades profesionales.

Quienes implementan este tipo de metodologías suelen recabar la mayor cantidad de información posible de un candidato antes de convocarlo para una entrevista. A través de su curriculum vitae, de una carta de presentación, de una serie de preguntas que suelen presentar en las convocatorias, e incluso de referencias que puedan obtener de antiguos empleadores, el contratante recopila una amplia cantidad de información sobre la trayectoria profesional del postulante.

Por ende, en la entrevista no necesita preguntar dónde trabajo anteriormente o qué estudios realizó. Todos esos datos, sumamente relevantes, se encuentran disponibles en los materiales que ya fueron presentados por el candidato, por lo cual no es necesario volverlos a preguntar durante una entrevista.

Las entrevistas por competencias buscan, en cambio, conocer a través de una serie de preguntas las habilidades del postulante y su relación o utilidad con la vacante laboral en cuestión. Durante este tipo de evaluaciones, cada instancia de interrogación busca indagar sobre las capacidades del postulante al momento de enfrentar diferentes situaciones laborales, lo realizado en esas circunstancias y lo aprendido.

Estos tres ejes son las claves de toda entrevista por competencias: una situación o emergencia laboral enfrentada, la resolución aplicada y su resultado, en términos positivos o no, y una reflexión sobre el aprendizaje obtenido de dicha experiencia. Bajo estas premisas, tus empleadores podrán reconocer tus habilidades, así como tu capacidad de resolución y mejora de cara a los nuevos desafíos que te tocarán enfrentar.

En general, las entrevistas por competencias cuentan con preguntas estandarizadas que se mantienen para todos los candidatos a un puesto. Es decir, más allá de la trayectoria o la formación de cada postulante, las preguntas serán las mismas, dado que están enfocadas en las tareas relacionadas a la vacante abierta. De esta forma, frente a las mismas preguntas, pueden evaluar las diferentes habilidades de cada postulante en base a sus respuestas.

Otra característica que suelen tener este tipo de entrevistas es la cantidad de personas que participan de la evaluación oral. Las entrevistas por competencias habitualmente son llevadas adelante por paneles de entre tres y cuatro personas, donde cada una de ellas realiza una pregunta al candidato. Esto permite, luego, realizar un análisis con diferentes opiniones de cada uno de los participantes, evitando juicios u opiniones subjetivas.

¿Cómo prepararse para una entrevista por competencias?

Si bien este tipo de evaluaciones suelen ser un poco más complejas que las tradicionales, dado que no sabes qué tipo de preguntas te pueden realizar, es posible llegar a estas instancias lo suficientemente preparado para poder sortearlas de manera positiva.

En caso de que te convoquen a una entrevista por competencias para un puesto en particular, lo más importante es prestar atención a los requisitos y tareas relativas al cargo vacante. Dado que la entrevista estará enfocada en conocer tus habilidades para dicho puesto, muy probablemente las preguntas estén orientadas a indagar en tus experiencias previas frente a ese tipo de tareas.

Es decir, no busquemos, al momento de responder, dar cuenta de toda tu experiencia, sino más bien en contestar con precisión sobre aquella habilidad sobre la cual están preguntando. Piensa en qué aspectos de tu formación y experiencia laboral se relacionan más con el trabajo solicitado y reflexiona sobre los aprendizajes obtenidos en esos puntos específicos.

Es importante que tus respuestas sean sencillas, breves y concisas. Estos valores son bien ponderados en las entrevistas por competencias, dado que se esperan que las respuestas vayan al grano y no que deambulen sobre aspectos que resultan poco importantes para la empresa o institución que está llevando adelante el proceso de contratación.

Todo proceso de búsqueda de trabajo suele estar cargado de frustraciones. Es importante no desmotivarnos en el camino y continuar creyendo en nuestras posibilidades. Con esfuerzo, trabajo, estudio y sacrificio, no hay cargo que este lejos de nuestro alcance. Sino es ahora, será en el futuro. Solo deberemos transitar un camino más largo.